El carnaval del Barrio Yungay, que se realizó este domingo, terminó con desórdenes, destrozos, intentos de saqueos, una persona lesionada y 14 detenidos, según informó ayer Carabineros.

Este evento se desarrolló con plena normalidad desde la tarde hasta las 22 horas, como era lo planificado. Pero transcurrida la actividad más de 1.000 personas quisieron seguir con la fiesta, negándose a abandonar el lugar e iniciando una serie de desórdenes.

Esto causó la molestia de los vecinos del sector y una serie de reclamos y llamados a carabineros, los que decidieron dirigirse al barrio. Según los uniformados, como vieron una fuerte presencia de alcohol y de drogas, decidieron intervenir y recibieron una lluvia de botellazos.

Una de las organizadoras de este evento, Rosario Carvajal, informó a hoyxhoy que a eso de las 12 de la noche intervino Fuerzas Especiales de Carabineros, incluyendo el carro lanzagua.

A su juicio, lo hizo "de muy mala forma", lo que generó la molestia de quienes estaban ahí, ya que a pesar de ser un carnaval reconocido y al que asistieron más de 15 mil personas, contaba con muy poco resguardo de carabineros y seguridad ciudadana.

La Fiesta del Roto Chileno se celebra hace 160 años por los vecinos del Barrio Yungay y este año partió el 10 de enero y terminará hoy.

Es un esfuerzo comunitario que pretende mantener viva una tradición, es por eso que el presidente de la junta de vecinos del barrio Yungay, José Osorio, lamentó lo sucedido. "No compartimos este tipo de hechos que vienen un poco para empañar el esfuerzo comunitario que lleva dos meses de trabajo", expresó.

El fiscal jefe de Curicó, Miguel Gajardo, informó ayer que el 6 de febrero formalizarán a Sandra Cartes Pacheco, pues existen sospechas de que golpeaba a personas que cuidaba en el hogar de ancianos "Jesús, María y José Ayuda", de esa comuna de la Región del Maule, donde trabajó hasta el 2013.

La investigación se inició ante una denuncia del hospital de Teno que advertía sobre las malas condiciones de salud en que se encontraban algunos residentes. El persecutor solicitó a la policía que realizara indagaciones que arrojaron la supuesta existencia de ilícitos.

Gajardo informó que las víctimas y testigos coinciden en que el actuar de la funcionaria era violento, por lo que la formalizará por el delito de lesiones menos graves.

"Fue bastante difícil llegar a concretar situaciones específicas ya que la mayoría de las personas, testigos de los hechos, eran los propios ancianos del hogar y muchos de ellos con condiciones físicas y mentales no aptas para poder dar cuenta bien de los hechos que estaban sucediendo. Sin embargo, el trabajo que se realizó pudo llegar a concretar situaciones específicas donde efectivamente había agresiones a lo menos a dos, un hombre y una mujer, y eso motivo a que la fiscalía solicitara al tribunal de garantía una audiencia de formalización de la investigación", afirmó el fiscal.

El 6 de octubre los padres de una guagua de 9 meses y boliviana llevaron a su hijo a la posta de Sobraya en el valle de Azapa, en Arica, con fiebre, vómitos y diarrea.

El niño fue revisado por el paramédico J.P.V., quien le dijo a la madre que lo llevara a un centro con mejores recursos, pero no le hizo una interconsulta, no se comunicó con ningún recinto ni dispuso una ambulancia con ese fin.

Los papás lo llevaron al hospital de Arica y la facilitadora C.O.V. derivó a la mamá a Admisión, donde fue atendida por la funcionaria J.D.R, quien sin preguntarle por la urgencia le informó que como extranjera debía pagar $30 mil. Sin atención, llevaron al niño nuevamente a la posta y esta vez el paramédico, sin revisarlo, le dio paracetamol. Horas más tarde murió en su hogar.

Ayer la fiscalía formalizó a tres funcionarios por su presunta responsabilidad. Según el SML, el lactante padecía una sepsis de origen intestinal y deshidratación, que con atención no le habría causado la muerte.