• "No es posible autodefenderse"

    Tribunal formalizó a automovilista que vestía chaleco amarillo y disparó contra personas.

    Leo Riquelme

    El Fiscal Nacional Jorge Abbott advirtió que perseguirán penalmente con la "máxima rigurosidad" aquellos casos que involucren a civiles atacando a manifestantes, como sucedió el domingo en Reñaca, donde un estadounidense baleó a un joven que protestaba en la avenida Borgoño. Ayer, el tribunal de garantía de Viña del Mar lo dejó en prisión preventiva, tal como solicitó el Ministerio Público.

    "Mandamos un mensaje a la comunidad: no es posible que la comunidad se autodefienda", afirmó Abbott.

    El imputado es John Cobin, un hombre de 56 años radicado desde mediados de los '90 en Chile, quien fue formalizado por homicidio frustrado. El sujeto vestía un chaleco amarillo, se bajó de la camioneta y disparó en más de dos ocasiones en la tarde del domingo a un grupo que protestaba en la playa, donde hirió a un ingeniero en informática.

    Según dijo su defensa ayer en la audiencia, Cobin "actuó en legítima defensa" porque vio una turba de "15, 20, 30 personas que se le abalanzaba" y le exigía bailar para permitirle pasar, en una especie de desafío para los automovilistas que transitan por zonas de marchas y que se ha popularizado a través de redes sociales en las últimas semanas. De acuerdo a su abogado, se asustó, sacó su arma inscrita y disparó "para reducir" a quienes estaban más cerca. Comparó su reacción con la que tiene un policía cuando se siente en peligro. Asimismo, agregó que el sospechoso tiene preparación y práctica como deporte el tiro en polígono, por lo que no habría intentado disparar a matar, porque de lo contrario habría apuntado a un órgano vital.

    La víctima se recupera en el hospital Gustavo Fricke de la lesión que sufrió en la zona externa de su pierna izquierda. "Gracias a Dios no me lo mató", aseveró su padre, José Luis Ahumada.

    El tribunal aceptó la tesis de la fiscalía, que asegura que Cobin es sospechoso de homicidio frustrado y junto con enviar a prisión al imputado dictó 90 días para la investigación. El Ministerio Público estimó que arriesga penas que van de 5 a 10 años.

    según la defensa Cobin tenía un chaleco amarillo para diferenciarse de los que se manifiestan.

    fue formalizado por homicidio frustrado. Quedó en prisión durante los 90 días que durará la investigación.

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