Leo Riquelme

Un hombre que era parte de las 600 personas investigadas por la desaparición en Portugal de la niña británica Madeleine McCann, ocurrida en 2007, se convirtió ayer en sospechoso del hecho para la policía londinense.

Según reportaron los oficiales, la pista comenzó cuando se cumplieron 10 años del extravío, producido en unas vacaciones familiares en Praia da Luz, en la región de Algarve, al sur de Portugal. Sus padres dejaron a la niña -entonces de tres años- para ir a cenar con unos amigos.

El sospechoso se encuentra preso Alemania por un delito no relacionado con el caso. Hoy tiene 43 años, pero al momento de los hechos tenía 30, aunque aparentaba ser menor.

De acuerdo a los antecedentes difundidos ayer, el sospechoso merodeó por Praia da Luz en esos días. Sus vehículos llamaron la atención de los policías: uno era una furgoneta VW T3 Westfalia de principios de los '80; y el otro un Jaguar británico de 1993, modelo XJR 6.

Este último auto tiene una particularidad. Al día siguiente de la desaparición de "Maddie" -que ocurrió el 3 de mayo de 2007- el Jaguar apareció inscrito a nombre de otra persona en Alemania.

Otro antecedente que desata las sospechas sobre este hombre es un llamada por teléfono que recibió ese mismo 3 de mayo en Praia da Luz, que se inició a las 19.32 y concluyó las 20.02.

Los policías ayer revelaron el número que hizo la llamada, lo difundieron y pidieron que quien lo conozca les facilite información.

"Siempre hemos querido encontrarla, descubrir la verdad y llevar a los responsables ante la justicia. Nunca renunciaremos a la esperanza de encontrar a Madeleine con vida, pero sea cual sea el resultado, debemos saberlo, ya que necesitamos encontrar la paz", dijeron en un comunicado sus padres, Kate y Gerry McCann.

+351 916 510 683 De ese número llamaron al sopechoso esa noche. La policía ofrece 20.000 libras por información ($19.760.746).

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La fiscalía acusó ayer de homicidio culposo al agente de policía blanco Derek Chauvin, quien presionó el cuello del afroamericano George Floyd con la rodilla, lo que finalmente le causó la muerte y desató una ola de protestas raciales y vandalismo en Estados Unidos.

Los persecutores también presentaron cargos contra otros tres agentes que estuvieron en el lugar donde fue detenido el hombre, bajo la sospecha de haber entregado un billete falso en un negocio en Mineápolis.

"La manera como el oficial Chauvin sometió al señor Floyd por un periodo prolongado fue un factor causal sustancial en que el señor Floyd perdiera la conciencia, lo que constituye daño físico sustancial, así como en la muerte", dice la denuncia.

La acusación contra los otros agentes afirman que secundaron las acciones de Chauvin, por lo que se emitieron órdenes de arresto.

Ayer EE.UU. vivió una jornada de protestas menos violenta que en los días anteriores. Según AP, hasta el momento van 9.300 detenidos.

El presidente Donald Trump desmintió en Fox News que fuera llevado la semana pasada al búnker de la Casa Blanca como precaución ante las protestas. Dijo que sólo hizo una visita "de inspección" y añadió que ha bajado con ese mismo fin "dos veces y media".

Pese a esto, el secretario de Defensa, Mark Esper, contó a NBC que cuando le pidieron ir ahí con el presidente no sabía para dónde lo llevaban.

12 personas han muerto en el contexto de las protestas, iniciadas el 25 de mayo, aunque aún no se aclaran sus circunstancias.

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El gobierno peruano desatendió los pedidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y decidió mantener como parte del tratamiento para el coronavirus la hidroxicloroquina, un fármaco que se utiliza contra la malaria. La institución pidió la semana pasada que se frenen todas las investigaciones y no se utilice para el Covid-19 debido a que la evidencia muestra que podría agravar la salud de los enfermos. Ayer, el ministro de Salud, Víctor Zamora, dijo a la prensa que "la hidroxicloroquina va a ser parte del tratamiento estándar del Perú hasta que el grupo de expertos que lo ha recomendado para usarlo en el nivel primario nos recomiende que no lo hagamos" . Este remedio ha sido recomendado profusamente por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

La ciudad de Wuhan, en el centro de China, ha realizado pruebas diagnósticas de coronavirus a casi todos sus 11 millones de habitantes en un esfuerzo masivo que resultó en el aislamiento de 300 personas sospechosas de tener la enfermedad, según informaron las autoridades. Wuhan es sindicada como la ciudad en que comenzó el brote de SARS-CoV-2 en diciembre, estuvo 76 días en confinamiento y es donde se produjeron la mayoría de los 83.021 casos confirmados y 4.634 decesos registrados en el país. Las pruebas realizadas en la segunda mitad de mayo se centraron en los residentes que aún no se habían sometido a ninguna, y sólo excluyeron a los niños menores de 6 años.