Matías Gatica Lindsay

La concejala Marcela Poveda (Ind-DC) fue víctima de un turbazo en su casa en La Pintana, donde un numeroso grupo de delincuentes amenazó a su familia, robó diversas especies y le disparó a vecinos que intentaron detenerlos mientras huían.

Cerca de las 23:00 horas del miércoles, al menos 16 antisociales llegaron en cinco vehículos, dos de ellos furgonetas, hasta un domicilio ubicado en calle José Edwards Bello, donde rompieron los barrotes del cierre perimetral de la vivienda para entrar a robar.

Al sentir los ruidos la familia se asomó para ver qué ocurría, momento en que al menos seis delincuentes se les abalanzaron y empujaron hacia la puerta, lo que aprovecharon para ingresar al inmueble, en que se encontraban la concejala, su marido, su hijo y la pareja de éste.

"Cuando abro la puerta lo único que veo es un montón de delincuentes, porque no eran niños, son delincuentes, tipos sobre 20 años, cortando con algo las protecciones de la reja de la calle. Mi marido me dice que corra, porque estaba mi hijo con su polola arriba. Yo subo al segundo piso, pero a mí me toman en el segundo piso, mi marido abajo y a mi hijo con la polola. Me tiran al suelo a mí, a mi marido también, entraron con pistolas... eran muchos", relató la autoridad comunal.

Los ladrones los amenazaron con armas de fuego y retuvieron para robar diversas especies, como ropa, juguetes y teléfonos celulares, todo avaluado en $8 millones. Luego escaparon en dirección desconocida.

Al percatarse de lo que sucedía, vecinos que se encontraban en una plaza cercana a la casa comenzaron a lanzarle piedras a los delincuentes para repeler el robo. Sin embargo, los antisociales percutaron varios disparos para facilitar su fuga.

"Yo creo que pensaron que teníamos electrodomésticos, electrónica o algo así. Aparte nos pedían joyas", dijo Poveda, quien contó que en la casa tenía cajas con ropa para un jardín infantil. "Yo trabajo en una fundación y eran donaciones que íbamos a hacer", explicó.

"No había ni efectivo ni había joyas, entonces, se volvieron como locos dando vuelta todo, desvalijando. A mi marido le apuntaron con el arma. En este minuto ni siquiera recuerdo bien todos los hechos", dijo Poveda, que agradeció la acción de los vecinos. "Esto es lo que le está pasando en nuestro país, es lo que está pasando en nuestra comuna", agregó.

Por orden del Ministerio Público, el caso es indagado por la Brigada de Robos de la PDI, que encontró en el lugar 11 vainillas de bala.

La PDI reportó ayer la detención de seis ciudadanos venezolanos con situación irregular en el país, quienes pertenecían a una banda que estaría vinculada con al menos tres secuestros extorsivos, de los cuales dos terminaron en homicidios. Estos quedaron al descubierto el 30 de agosto en Lampa, donde dos venezolanos fueron hallados sin vida en un sitio eriazo.

La caída de la banda se dio en medio de la investigación a una presunta casa de tortura donde habría estado plagiado a fines de junio el exacalde de Macul Gonzalo Montoya.

Entre los detenidos está Jhonaiker Rodríguez, quien habría participado de este secuestro y estaría vinculado a distintas facciones del Tren de Aragua.

Este sujeto, que en la mañana de ayer quedó en prisión preventiva por el secuestro del exalcalde, es "una persona bastante avezada, con una frialdad que lo destacaba dentro de estas facciones que han operado en nuestro país. Y precisamente este sujeto integró distintas facciones, muchas de ellas ya desbaratadas", comentó el subprefecto de la PDI, Hassel Barrientos, quien agregó que además de los ya mencionados tres secuestros por homicidio y el del exalcalde, es indagado por otros tres plagios.

Barrientos agregó que este sujeto era usado como una especie de "instrumento letal para la ejecución de este tipo de actividades criminales"; mientras que el fiscal Ernesto González dijo que el sospechoso tenía una orden vigente de captura y que "está situado en el lugar de cautiverio (de Montoya) y podría estar ligado al proceso de extorsión al círculo familiar".

La PDI incautó armas de fuego y teléfonos celulares.

Carabineros detuvo a cuatro personas que formaban parte de una organización criminal que robaba vehículos y piezas en Villa Alemana y en Curacaví. Los uniformados allanaron dos viviendas en esta última comuna, donde detuvieron a dos mujeres de 30 y 33 años, y a dos hombres de 35 y 21 años, este último con antecedentes por robo de vehículo motorizado, quienes son acusados de cometer estos delitos. En el operativo se les incautó un arma de aire comprimido, más de dos kilos de marihuana, una placa patente robada y algunas herramientas que habrían utilizado para realizar los robos, como una ganzúa y un destornillador tipo ganzúa. Además, les decomisaron un celular y vestimentas asociadas a la comisión de delitos. Los sujetos fueron puestos a disposición de la Fiscalía.

El OS9 de Carabineros detuvo a un ciudadano venezolano acusado de asesinar al empresario Jaime Solanes, de 72 años, en Quinta Normal. El hecho ocurrió el 26 de marzo, cuando la víctima llegaba en su vehículo a la fábrica de plásticos, donde un grupo de delincuentes, que lo habría estado esperando, le dispararon en reiteradas ocasiones, provocándole la muerte. El sospechoso de este presunto crimen por encargo fue detenido en un inmueble ubicado en calle Fuenzalida Urrejola, en La Cisterna, donde se le incautaron dos teléfonos celulares relevantes para la investigación. El sujeto, primer detenido por este caso, quien fue formalizado en la tarde de ayer y quedó en prisión preventiva.