Nicolás Labra G.

Alexis Sánchez llegó el martes al país para incorporarse a la concentración de la Selección Chilena en medio de un mal momento en el Manchester United del cual todavía no es capaz de salir.

Para contrastar eso, está el análisis de la evolución de su participación desde que llegó a los 'Diablos Rojos' a mediados de enero. En donde pasó de abarcar un amplia área de influencia hasta simplemente diluirse como ocurrió en el partido del domingo ante el Manchester City, donde apenas tocó el balón seis veces en casi 20 minutos, el jugador que menos participación tuvo con la pelota de su equipo en la derrota 3-1.

Por ejemplo, en su debut en Premier con el United ante el Tottenham Hotspur el 31 de enero, se vio a un Alexis activo abarcando espacio más allá de la banda. Jugó todo el duelo y la tocó 77 veces, solo una vez menos que Ashley Young.

El 10 de marzo, en la victoria 2-1 ante el Liverpool, seguía manteniendo la titularidad, pero el fútbol más vertical de José Mourinho y de poca elaboración lo empezaba a aislar: apenas tocó el balón 48 ocasiones, el cuarto en dar más pases.

La tendencia es que cuando el United juega un fútbol propositivo que controla al rival y suma más pases, el chileno tiende a ser protagonista. En uno de sus duelos más brillantes, por ejemplo ante el Swansea el 31 de marzo, anotó un gol y tuvo claramente marcada su zona de influencia en la banda izquierda en el triunfo 2-0.

Pero en esta temporada la cosa ha cambiado. Problemas físicos, el quedarse fuera de parte de la pretemporada en Estados Unidos, y los malos resultados hicieron que el chileno perdiera protagonismo en minutos. Significativo fue que en el empate 2-2 ante el Chelsea en octubre, el primer partido grande de la temporada, apenas jugara cinco minutos y la tocara 10 veces.

Y para cerrar el círculo del mal momento, sus prestaciones tres semanas después siguen débiles en relevancia. Ante el City jugó más que frente al Chelsea, pero su presencia fue testimonial, lejos de su mejor versión.