por álvaro peralta / @dontinto

Fresco, recién sacado del mar y comido ahí mismo en la playa por los mariscadores. Ofrecido ahumado y seco en unas tiras que cuelgan de los mercados del sur. En bolsas o potes plásticos que se guardan para clientes destacados en pescaderías, ferias libres y mercados. Así es el piure -que en mapudungún significa algo así como "marisco rojo y comestible"-, un producto que no deja indiferente a nadie. Están (estamos), los que no se resisten a probarlos cuando están disponibles en alguna carta y los que arrugan la nariz cuando justamente ven a otros casi descontrolados engullendo piures. ¿Por qué sucede esto? Probablemente porque la principal característica de este marisco es su potente sabor. Porque claro, es de un lindo color rojo, intenso, y su carne es suave, pero consistente. Sin embargo, su sabor es otra cosa. Sabe a yodo, a mar y a olas rompiendo contra un roquerío del Océano Pacífico. Por lo mismo, son pocos los que gustan del piure crudo y entero, sin más aditamento que unas gotitas de limón. De hecho, mucha gente lo consume en pequeñas cantidades, picado bien fino (demasiado para mi gusto) y acompañado de muchas otras cosas. Aún así, hay individuos que ni así lo consumen. De hecho, una sola mancha roja en su plato que pudiese ser piure los hace rechazar una comida completa. Bueno, allá ellos. Para el resto, solo queda disfrutar que -por ahora- el piure no está sujeto a ninguna veda y es relativamente fácil de conseguir. Así que lo único que se puede sugerir es que se aprovisionen de este gran producto y se lancen a prepararlo como prefieran. Es decir, como parte de un mariscal, con arroz, en una cazuela chilota o -por qué no- como en la receta que hoy aquí presentamos. Salvo que sean del grupo de los mañosos -que en Chile no son pocos-, seguro les encantará.

Deborah Moreno G.

Organizar un viaje es algo que a la gran mayoría emociona y provoca mucha ansiedad, sobre todo si es a un lugar soñado, pero para muchos el trámite de hacer la maleta es una de las tareas más complicadas y tediosas. ¿Qué llevar? ¿Todo importa? ¿De qué forma ordeno?.

Los blogs españoles Que nos vamos y Viviendo en Libertad, indican que lo esencial es saber a dónde se irá, el tipo de clima y la condición del viaje, si es mochilero (aventura) o placer (descanso) para considerar las características del equipaje.

Ambos sitios recomiendan hacer una lista antes de armar la maleta, para evitar agregar cosas innecesarias. Agregan que llevar un bolso o maleta de mano, donde se guarden los documentos y cosas de valor, es de mucha ayuda, además de especialmente seguro. Otra recomendación, es que las chaquetas o abrigos se lleven en la mano, así hay más espacio en el bolso.

La periodista, Beatriz Pérez, que acostumbra a viajar por dos o tres meses al año, recomienda dejar en casa los "por si acaso" porque "en la realidad nunca los necesitamos y llenamos la maleta de cosas que no usamos. La experiencia ayuda a saber qué cosas llevar".

Para ella, es clave llevar artículos que posiblemente no se encontrarán en el viaje y que de verdad se usen.

La bloguera de viajes, Gloria Apara, recomienda hacer un equipaje liviano, porque siempre hay lugares donde se puede lavar. Además, sugiere que solo se lleve una toalla para la playa "los hoteles u hostales siempre proveen de éstas para la ducha", mencionó. La cantidad y el tipo de calzado es otra interrogante, Gloria sugiere para las mujeres llevar un par de zapatillas, sandalias y zapatos tipo ballerina.

Prepararación

Una vez definido qué es lo que se quiere incluir en el bolso, es momento de ordenar para que todo entre.

En YouTube hay varios tutoriales con datos y consejos. Algunos destacan que las prendas más gruesas, como jeans, deben ir al fondo de la maleta y sin doblarlos demasiado. Las poleras o blusas hay que enrollarlas, igual a un cilindro. El calzado es recomendable que vaya en bolsas, para no ensuciar la ropa y con los calcetines adentro. Los accesorios, se sugiere, guardarlos en pastilleros.

Ayer se realizó la última premiación del concurso ¿Qué cosa en tu vida no tiene precio?, organizado por el diario hoyxhoy con motivo de su quinto aniversario.

En la instancia se premió a José Jiménez, Jeniffer Farías, Catalina Barrera, Jessica Alvarado, Evelyn Muñoz, Tania Leyton, María José Lobo, Rommy Lagos, Vivían Albares, Francisca Pérez, Bárbara Mardones, Gonzalo Armijo, Konny Fernández, Francisca Araya, Norka Tapia, Angie Lanza y Daniela Reyes. Cada uno envío una imagen que retrataba lo que no tenía precio.

Por ser el último sorteo, ayer Nicole Vergara y Zuar Briones recibieron los premios gordos del concurso: una bicicleta y un mes gratis de productos Bravos, respectivamente.