Natividad Espinoza R.

En plena época de faldas, vestidos, shorts y trajes de baño cobra mucha importancia entre las mujeres la depilación.

Actualmente hay varias formas de eliminar el vello no deseado, todas las que según el dermatólogo y docente de la Universidad Mayor, dr. Ricardo Sánchez (@idermatologo) "tienen sus ventajas y desventajas". "Lo importante es elegir correctamente el método a usar dependiendo del tipo de piel, la zona a depilar y la cantidad y tipo de pelo", añadió. En este contexto, tanto él como la cosmetóloga del Instituto Santa María, Paz González, hablaron a hoyxhoy sobre los más comunes.

La afeitadora: rápida y cómoda, es una de las herramientas favoritas de las chilenas. No obstante, la cosmetóloga advirtió que pasarse la afeitadora puede dañar la piel, por lo que hay que tener cuidado. "Evitar ejercer mucha presión contra la piel es lo más importante, pero también es clave no afeitarse nunca en seco", manifestó. Lo mejor, a su juicio, es hacerlo con la piel enjabonada bajo la ducha. ¿Lo peor? Como el pelo se corta y no se arranca, hay que volver a afeitarse tras dos a tres días.

Pinzas: cuando hay tiempo y paciencia, usar la pinza es una buena alternativa, puesto que dura unas tres semanas. "Hay quienes dicen que el uso de pinzas, sobre todo en la cara, puede generar flacidez. Eso no es verdad", explicó la experta. En esto coincidió Sánchez, quien especificó que "las causas para la flacidez de la piel son múltiples, algunas propias de la piel de cada persona (su genética) y otras son causas externas como por ejemplo la exposición prolongada y no protegida al sol o el uso de solárium, fumar tabaco, malnutrición, déficit de vitaminas, enfermedades que afecten la circulación sanguínea, etc.".

La máquina: es mucho más rápido que usar las pinzas y su efecto dura lo mismo, ya que también saca el pelo de raíz. Sin embargo, González afirmó que es importante hacerlo sin distracciones, porque cuando hay descuidos la máquina puede "pescar la piel" y herirla. El médico, en tanto, advirtió que la máquina no es buena para su uso en la cara.

Cera: "es igual de doloroso que pasarse la máquina, pero es más fácil dañarse. Lo mejor es ir a un centro de estética para que lo haga una profesional", contó la cosmetóloga. ¿Lo malo? Hay que esperar que los pelos tengan cuatro centímetros de largo para tener resultados óptimos y, dijo el médico, "no se aconseja a quienes tienen problemas de circulación sanguínea o várices".

Cera en frío: depilarse con cera en frío es menos doloroso que hacerlo con cera caliente y no hay problemas para hacerlo en casa. "Algo que hay que tener en cuenta es que hay que pegar bien las tiras de cera a la piel y jalar en sentido contrario a la dirección de los pelos", dijo González.

Crema depilatoria: "sus efectos duran poco más que los de la afeitadora, aunque también corta el vello", comentó la cosmetóloga. En tanto, Sánchez sostuvo que "los depilatorios químicos (como las cremas depilatorias), es decir, aquellos que eliminan al pelo luego de que este emerge a la superficie cutánea, si no son bien utilizados, pueden generar irritación y posteriormente hiperpigmentación, lo que quiere decir que la persona quedará sin pelo temporalmente pero con manchas oscuras en las zonas que se irritó".

Láser: "Una de las bondades del láser es que se puede usar en casi cualquier parte del cuerpo, pero no se realiza en la zona del globo ocular y la piel debe estar sana antes de usar el láser", dijo el dermatólogo. Añadió que "como todo método depilatorio, el uso de láser tiene efectos secundarios que las personas deben conocer. Post aplicación los efectos pueden variar desde picazón, leve enrojecimiento hasta inflamación localizada, que en algunos casos puede durar dos horas y a veces más". González añadió que "hay que saber que la depilación láser no es 100% definitiva. No obstante, es un excelente método y mejor en invierno, porque cuando se está en tratamiento láser no hay que exponerse al sol".

Aún faltan algunas semanas para que empiece el verano, pero el calor y los días extra largos invitan a empezar a preparar los clásicos del verano. Aquí les traigo una versión de pastel de choclo vegetariano con varias opciones de relleno y que además no lleva mantequilla ni leche, se prepara con el típico choclo precocido en bolsa y es impresionantemente rico y fácil de preparar.

(Para una fuente grande, 2 medianas o 4-5 individuales)

Ingredientes

-1 cebolla grande

-1 berenjena grande

-1 taza de carne o proteína de soja orgánica (u otra berenjena o una bandeja de champiñones)

-4 huevos duros (opcional)

-1 taza de aceitunas

-2 bolsas choclo congelado (a la espera de los choclos de verano), ojo que viene precocido

-1 taza hojas de albahaca fresca

-aceite de oliva

Preparación

Hidratar la soja en un bowl con agua por 20 minutos, sacar y estrujar. Reservar.

Picar la cebolla en cuadritos, saltearla en aceite de oliva, agregar los vegetales en cuadritos y la carne de soja. Sazonar con sal, pimienta y comino a gusto, reservar.

Si lo hacen con berenjenas y champiñones lo agregan al sofrito.

Poner en la juguera o procesadora el choclo descongelado, la albahaca, un chorro de aceite de oliva y sal a gusto. Procesar hasta que esté cremoso, ojo que el choclo viene precocido así que no necesitamos pasarlo por fuego ahora. En una fuente poner el pino, huevos duros laminados, un toque de sal y pimienta extra, aceitunas a gusto y por encima la pastelera. Pueden agregar un toque de azúcar o stevia si les gusta el dulzor y al horno, a 180 grados, por 30 minutos ¡O hasta que esté dorado y precioso!