• ¿Le duele el alto precio de la palta? Ahorre reemplazándola por otros alimentos y preparaciones

    Hacer cremosas pastas a base de verduras como arvejas, habas, brócoli, espárragos y espinacas es una atractiva opción.

    Natividad Espinoza R.

    Hace semanas que el alto precio que ha alcanzado la palta tiene descontentos a sus numerosos fanáticos, quienes han creado y compartido memes al respecto e incluso algunos han llamado a evitar comprarlas, a fin de que sus proveedores tengan que reducir los montos necesarios para adquirirlas.

    En este escenario surgen ideas como sustituir esta fruta, tanto a nivel nutricional como buscando mezclas de otros ingredientes que logren una consistencia similar, para ser añadidos a los sandwiches en vez de la valorada palta molida.

    La nutricionista pediátrica de Clínica Universidad de Los Andes, Bárbara Castillo, explicó que "la palta es del grupo de los alimentos ricos en lípidos, donde también se encuentran los aceites de origen vegetal, las aceitunas y los frutos secos".

    Entonces, a nivel nutricional, la palta se puede reemplazar con porciones de aquellos alimentos.

    La experta sostuvo que dos cucharadas soperas de esta fruta, a la que por su actual precio llamó "oro verde", equivalen a siete aceitunas sin cuesco (ojalá bajas en sodio y lo más naturales posible), una cucharada de aceite de oliva o la misma dosis de aceite de canola.

    "En los frutos secos las porciones varían más, porque tienen distintos tamaños. Pero, por ejemplo, dos cucharadas de palta se pueden sustituir por seis almendras, ocho maníes o 10 pistachos", aseguró Castillo.

    También recomendó hacer mantequilla de maní, que se logra simplemente moliendo estos frutos secos.

    ¿qué ponerle al pan?

    "Reemplazar el sabor de la palta es muy difícil, pero si se quiere hacer una preparación que quede parecida a la plata molida para agregarla a un sandwich se puede optar por una verdura que tenga un color similar y que al molerla logre una consitencia parecida", afirmó la nutricionista.

    Entre las verduras que recomendó usar para estas preparaciones figura el brócoli (al vapor o un poco cocido) y también el espárrago, aunque como ambos tienen olores y sabores tan característicos, si se quiere conseguir algo más neutro sugirió optar por arvejas o habas.

    Una vez molidos, estos alimentos se pueden mezclar con crema, yogur o leche descremada y, de ser necesario, añadir un poco de aceite de oliva.

    Aquí, otras alternativas compartidas por expertos para inspirarse y disfrutar.

    Puré de arvejas

    por marisol melgarejo (@marisol_melgarejo)

    Ingredientes

    -600 gr de arvejas partidas

    -1/4 de cebolla

    -2 dientes de ajo

    -pimienta blanca

    -sal

    Preparación

    Dejar las arvejas en remojo durante toda una noche y al día siguiente añadirles agua nueva con sal a gusto. Cocer durante 30 minutos a fuego medio y retirar cuando estén blandas.

    Dejarlas en un colador, conservando el agua.

    En un procesador de alimentos añadir las arvejas y un cucharón de agua. Activar hasta obtener una textura cremosa. Agregar más agua si fuera necesario.

    Picar los dientes de ajo y la cebolla en cubos pequeños y sofreír hasta dorar, aliñando con sal y pimienta blanca. Añadir al puré y volver a procesar.

    Hummus de espinacas

    por alejandro ramírez

    Ingredientes

    -400 gr de garbanzos cocidos

    -200 gr de espinacas

    -1 cda. de tahini (pasta de semillas de sésamo molidas)

    -1 cdita. de comino molido

    -jugo de 1/2 limón

    -sal, pimienta

    Preparación

    Poner todos los ingredientes en un procesador de alimentos o licuadora hasta conseguir una textura cremosa.

    Si cuesta que se mezcle todo se puede ir parando la acción del electrodoméstico para hacer que los ingredientes que queden en las paredes se unan más fácilmente.

    Pesto de palmitos

    por jazmín silva (@lascocinerasmetaleras)

    Ingredientes

    -1 tarro de palmitos de 400 gr

    -1/2 taza de perejil

    -1/2 taza de almendras o nueces

    -2 dientes de ajo

    -3 cdas. de aceite de oliva

    -2 cdas. de jugo de limón

    -1/2 cdita. de sal

    -1/2 cdita. de pimienta negra

    Preparación

    Poner las almendras o nueces en una sartén limpia y tostar a fuego medio hasta que estén fragantes y se vean ligeramente tostadas. Retirar del fuego.

    Poner los frutos secos en un procesador de alimentos junto con el perejil, ajo, jugo de limón, aceite de oliva, sal y pimienta. Procesar hasta que no se vean trozos grandes de ajo.

    Picar los palmitos en trozos no muy grandes y agregarlos al procesador. Activar el electrodoméstico hasta que los palmitos se integren, tratando demno molerlos porque la idea es que quede con textura.

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