periodista de fox sports

Fútbol, tormenta y final

Chile alcanzó la soñada definición. Con unos primeros 25 minutos brillantes pudo doblegar a un difícil equipo colombiano que no tuvo respuestas para la intensidad y ritmo de la Roja en ese comienzo.

Fue clave un movimiento táctico hecho por Juan Antonio Pizzi. La posición de José Pedro Fuenzalida, mas retrasad0 y abierto por la derecha, le entrego sorpresa y velocidad por ese sector. Fue allí donde la selección encontró el camino al gol. El jugador de universidad católica ganó todos sus duelos en ese lugar.

Sorprendió el DT con esta modificación utilizando un sistema táctico diferente. Chile enfrentó el partido con un claro 4-4-2, intentando poblar el mediocampo, y dejando libres a Eduardo Vargas y Alexis Sánchez en delantera para recibir la compañía siempre sorpresiva del ya mencionado Chapita.

A partir de ahí, y con el 2-0 la Roja retrocedió unos metros, más por el empuje de los cafeteros que iniciativa propia, y comenzó a aguantar el partido. Los últimos 20 minutos de la primera fracción entregaron otra buena noticia: Claudio bravo retomó la seguridad acostumbrada y devolvió la confianza. El capitán, como es propio de los grandes, apareció en los momentos decisivos. Despejó todas las interrogantes respecto de su rendimiento y tuvo tres intervenciones notables.

El primer tiempo finalizó con una Colombia crecida, pero incapaz de hacer daño. De allí vino el entretiempo más largo del que se tenga memoria. La espectacular tormenta eléctrica mojó a los pocos chilenos que estaban en el estadio Soldier Field de Chicago y llenó de nervios a los que estábamos en casa.

La pregunta se multiplicaba por todos los rincones del país, ¿a quién favorecerá esta espera? La respuesta era mayoritaria: debía terminarse hoy, más allá de la larga postergación. Después de casi tres horas de espera. La Roja volvió al campo sin fisuras. Pudo manejar el trámite del segundo lapso sin contratiempos más allá de algunos errores en la salida y la inquietud que provocaba la cancha mojada que era más rápida y peligrosa.

Cuando el conjunto de Pekerman amenazó con una recuperación, la enésima falta de Carlos Sánchez y su expulsión lo sepultó. A partir de ese instante la final en New Jersey se sentía cada vez más cerca. Y aunque Chile no pudo dar el golpe de knoc out en el marcador, el término del compromiso trajo los abrazos merecidos.

Los mismos que surgen desde la cancha con un equipo que supo ganarle a la adversidad y el mal rendimiento, un cuerpo técnico que ya imprime su sello de calidad y un pueblo ansioso de más gloria. Argentina es el último obstáculo. El mismo de hace un año, pero este grupo sabe de hazañas y ayer consiguió escribir un capítulo más de su gloriosa historia. Esta vez, con truenos y relámpagos.

columna

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Charles Mariano Aránguiz

Sí, como todas las finales. Llegan los dos mejores equipos.

Feliz porque en lo personal estaba viviendo un momento difícil y ahora tengo la oportunidad de jugar otra final...

Fue complicado. Había compañeros que estaban preparados. Yo no jugué solo. Nos comunicamos muy bien con el Gato. Erik entro e hizo las cosas bien. Sin duda, Arturo y Marcelo son fundamentales, pero hoy demostramos que otros compañeros pueden hacerlo bien de la misma forma.

Lo dije. Llegan los dos mejores. Ahora vamos a disfrutar este momento y ya mañana, pensaremos en Argentina

Braavo

Vinimos con humildad, con deseos de trabajar y revalidar la copa anterior. Hicimos un buen primer tiempo, logramos convertir en los momentos precisos. Aprovechamos las falencias que tuvieron en el primer tiempo

El máximo de los respetos. Ya nos tocó con ello. Por algo han estado en tres finales consecutivas. Sabemos que es un rival muy fuerte para esta final.

Apareció como titular reemplazando a Arturo Vidal y estaba realizando un buen partido, pero llegó el fatídico minuto 24 donde Pedro Pablo Hernández se lesionó. El volante del Celta de Vigo fue a cabecear un balón, pero arriba fue golpeado por Daniel Torres y al caer, Carlos Sánchez, quien fue a pelear el balón y se resbaló, lo agarró abajo y el chileno quedó al medio, por lo que en la caída su rodilla izquierda hizo palanca y sintió inmediatamente el dolor. Pese a que volvió al campo, apenas pudo estar un minuto y tocar una vez la pelota hasta sentarse en el suelo y pedir definitivamente el cambio. Para mala suerte chilena, Sánchez ni siquiera se llevó amarilla por esa falta. Durante la Copa Centenario, además de ayer, Hernández jugó sólo los 90 minutos ante Bolivia. Falta confirmar la gravedad de su lesión, la que sería un esguince en su rodilla y lo tendría en duda de cara a....

Claudio Bravo fue uno de los más criticados en la fase grupal, pero ya había dado muestras de su recuperación ante México, y ayer lo confirmó con su gran actuación del torneo ante los cafeteros. Especialmente en el primer tiempo, donde tuvo, a lo menos, cuatro atajadas portentosas. Sus tapadas recibieron loas en Twitter: "Qué grande Bravo, vamos Chile mierda", escribió Esteban Paredes. Cristián Álvarez también recordó a los críticos del portero. "Sigan hablando mal de Bravo! Clave en los momentos precisos". Y hasta el piloto Ignacio Casale hizo un juego de palabras: "Claudio Bravo realmente bravo para el arco".

De dulce y agraz fue la noche de Chicago para Alexis Sánchez. Por una parte, el "Niño Maravilla" celebró su partido número 100 con la Roja con el pase a su segunda final consecutiva de la Copa

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