Nicolás Labra G.

A sus 31 años, la carrera de Lionel Messi da para un almanaque lleno de datos a punta de goles. Decisivo como siempre, el argentino, justo cuando cumplió 14 años de su primer tanto como profesional el 2005 ante el Espanyol, se convirtió en el salvador del Barcelona al anotarle dos goles al Liverpool, claves para definir el 3-0 en el partido de ida de las semifinales de la Champions League.

Si Jürgen Klopp dijo en la previa que el Camp Nou no es un templo, la "Pulga" se encargó de demostrarle que el único que manda ahí como Dios al que todos rinden aplausos es él.

Pero para llegar a los goles de Messi el Barcelona tuvo que sufrir. El Liverpool planteó un partido de alto ritmo futbolístico. Ernesto Valverde no evitó el desafío e incluyó como titular a Arturo Vidal, para pelear el golpe a golpe que propusieron los Reds. Y el Barcelona resistió gracias a Ter Stegen, Gerard Piqué, Clement Lenglet y las fallas de los ingleses, que desperdiciaron al menos tres chances claras con Sadio Mané, James Milner y un tiro al palo de Mohamed Salah.

Apareció primero Luis Suárez, quien rompió una larga sequía y anotó su primer gol en el torneo tras desviar un centro de Jordi Alba en el minuto 26, inicio de jugada en la que participó un activo Vidal.

En el segundo lapso el Liverpool acorraló a los culés por cerca de media hora y todos tuvieron que correr, comandados por un buen despliegue del "King".

Para coronar la jornada solidaria del equipo azulgrana, apareció Messi con sus dos goles. En el primero, siguió un tiro al travesaño de Suárez y definió con el arco vacío a su disposición.

La joya llegaría al 82', con un tiro libre desde unos 30 metros que se coló en el ángulo de Allison, anotando el gol 600 de su carrera y dejando al Barcelona con un pie en la final, a la espera de la revancha del martes 7.

a los 600 goles como jugador del Barcelona llegó Messi tras sus dos tantos al Liverpool.

Era claro que el Liverpool saldría a presionar al Barcelona. Por eso la duda era si el DT Ernesto Valverde optaría por cuidar el balón con Arthur, o ir de igual a igual con Arturo Vidal. Prefirió lo segundo y el chileno no defraudó, en uno de sus mejores partidos desde que llegó al club catalán.

"Mi gran objetivo es ganar la Champions y jugar los partidos importantes. Era el partido más importante de la temporada y traté de dar lo máximo, lo disfruté mucho y estoy contento", dijo el chileno en la zona mixta.

El volante suma 20 títulos, pero le falta la "Orejona" en su palmarés. "Lo dejo todo por ganar este título (la Champions). Dejé la vida en la cancha y ojalá la vuelta sea igual para después jugar la final. Hay que tener respeto con el Liverpool, tienen un gran equipo y después de que termine ese partido te puedo decir que tengo mi cabeza puesta en los 90 minutos de la final", agregó.

Ernesto Valverde también alabó al chileno por su despliegue: "Arturo está haciendo un gran final de temporada y pensé que nos iba a venir bien para este partido, porque ellos no te dejan hacer tu juego, te rompen el ritmo y el primer tiempo ha sido así", analizó.