Nicolás Labra G.

Con la presencia del presidente Aníbal Mosa y el abogado de Blanco y Negro, Rodrigo Quintana, la concesionaria presentó una querella contra ocho hinchas identificados sobre los desórdenes sucedidos el domingo en el Estadio Monumental.

Quintana explicó la querella criminal diciendo que buscan "perseguir los delitos que se cometieron en forma previa y durante el partido entre Colo Colo y Universidad Católica. Incluye la individualización de ocho personas que han sido identificadas gracias a las cámaras de seguridad".

Mosa fue duro con lo sucedido y declaró que "estos no son hinchas para nosotros, son delincuentes que no merecen estar en los estadios".

El presidente cree que es fácil que desde la Asociación impongan medidas y castiguen a los clubes por lo sucedido, mostrándose en desacuerdo en dar por finalizado el encuentro.

"La gente de la ANFP sentada en su trono feudal da indicaciones de como se debe manejar los clubes, cuando parte y termina un partido. Nosotros estamos metidos con las manos en el barro todos los días", comentó.

"Le ponemos el pecho a las balas, pero no se ensañen con Colo Colo", cerró asumiendo que el Tribunal de Disciplina castigará el Monumental.

Junto con la acción judicial, Aníbal Mosa también se refirió al presente del equipo. Con tres derrotas seguidas se mostró disgustado con lo que ve en la cancha, e incluso alertó a Mario Salas. "Nos gusta mantener procesos pero las realidades deportivas tienen que estar presentes también arriba de la mesa", lanzó.

Pero puso una cuota de mesura agregando que "no nos gusta donde estamos, a quien le podría gustar como se está jugando y la posición en la que estamos en la tabla. Confiamos en el trabajo de Mario, el directorio entrega y retira las confianzas".