• Trump vuelve al golf sin reconocer la derrota: "Es imposible que Biden superara a Obama en estados"

    El aún Presidente de Estados Unidos está convencido en el fraude electoral y los acusó derechamente de "ladrones". Las primarias en Georgia se pactaron para el próximo 5 de enero, luego de que los partidos no lograran la mayoría necesaria.

    Camila Infanta S.

    Poco antes de las 10 de la mañana (hora Washington) el ahora presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó a su club de golf de Virginia por segundo día consecutivo. Un día después que los medios estadounidenses dieran por ganador a su contendor, el demócrata Joe Biden, quien además en la noche anterior reconoció su triunfo prometiendo que se encargaría de "unir" a un país altamente polarizado.

    De todas maneras, Trump a través de su cuenta de Twitter se dio el tiempo de insistir en la tesis que mantiene desde la semana pasada: las elecciones fueron un fraude. "Creemos que estas personas son ladronas (…) ésta fue una elección robada. La mejor encuestadora de Gran Bretaña escribió esta mañana que esta fue claramente una elección robada", escribió.

    Y continuó: "Es imposible imaginar que Biden superó a (Barack) Obama en algunos de estos estados. Donde importaba, robaban lo que tenían que robar", acusó, en referencia a la victoria de Biden en zonas clave como Pensilvania y Detroit.

    El aún Mandatario estadounidense agregó que "tenemos una historia en este país de problemas electorales. En Pensilvania hay una orden de la Corte Suprema de Justicia para obligarlos a separar las papeletas que se recibieron después de la fecha límite legislativa" y recordó que es "un gran grupo de papeletas. Cuando se habla de problemas sistémicos, es sobre cómo se autenticaron estos votos, porque si hay un problema en el sistema sobre la autenticación, eso afectaría seriamente a toda la elección".

    Senado hasta 2021

    La segunda vuelta en Georgia, que no logró obtener una mayoría absoluta de los votos de ninguno de los dos partidos, se programó para el próximo 5 de enero de 2021.

    Hasta ayer, la cuenta era de 48 republicanos y 48 demócratas. En los últimos comicios en esa zona, los demócratas obtuvieron avances sobre los republicanos, impulsados por una ola de nuevos votantes. Pero ningún demócrata ha sido elegido senador en unos 20 años. Debido a la importancia de la primaria, algunos analistas estiman que las colectividades podrían llegar a gastar hasta 500 millones de dólares en las campañas.

    De hecho, el sábado y tras el reconocimiento del triunfo de Biden, el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, señaló ante una multitud que celebraba en las calles de Brooklyn en Nueva York que "ahora tomamos Georgia, y luego cambiamos Estados Unidos".

    Las celebraciones se extendieron por gran parte del país con cientos de personas en las calles vitoreando la llegada de Biden a la presidencia y Kamala Harris como la primera vicepresidenta de EE.UU..

    Medidas covid

    Esta será una semana llena de anuncios para la próxima administración de EE.UU.. El presidente electo Joe Biden planea nombrar al exdirector de salud pública, el doctor Vivek Murthy, y al excomisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos, el médico David Kessler, como copresidentes del grupo de trabajo de la respuesta al coronavirus. El anuncio fue hecho por Kate Bedingfield, subdirectora de campaña de Biden.

    290 electores se contaban ayer para el próximo presdente de EE.UU., Joe Biden.

    US$500 millones se podrían gasta en las nuevas campañas electorales por el Senado.

  • Arce asume como Presidente llamando a la reconciliación

    El mandatario boliviano aseguró que el gobierno transitorio fue "brutal" y "golpista".

    El izquierdista Luis Arce asumió como nuevo presidente de Bolivia con un llamado a la reconciliación y reivindicando a los muertos del estallido social del año pasado tras unas elecciones denunciadas de fraudulentas que hicieron renunciar a Evo Morales.

    Tildó de "brutal" y "golpista" al gobierno transitorio de Jeanine Áñez por desconocer -según dijo- "la voluntad del pueblo" en las anuladas elecciones denunciadas como "dolosas" por la Organización de Estados Americanos (OEA). Áñez estuvo ausente en la juramentación.

    "Nos comprometemos a rectificar lo que estuvo mal y profundizar lo que estuvo bien", dijo Arce al tiempo que calificó de "minoritarios" a los opositores que en protestas callejeras rechazaron su triunfo con el 55% de las preferencias.

    Más conciliador pareció su vicepresidente David Choquehuanca, aymara, quien dijo que el nuevo gobierno "significa un nuevo tiempo para escuchar y sanar.

    Arce (57) asume un país polarizado y marcado por el revanchismo político desde la caída de Morales, mentor del nuevo mandatario.

    El contraste también se vivió en las calles al replegarse grupos opositores que por días protestaron. En tanto, en el bando oficialista, seguidores y organizaciones indígenas armaron una colorida fiesta de danzas folclóricas afuera del palacio de La Paz.

    el 23 de octubre se confirmó el triunfo de Luis Arce como próximo presidente de Bolivia con el 55% de los votos.

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