Mientras Argentina y Uruguay terminaban de disputar su intenso partido en La Serena, en Santiago, cerca de las 22:25, ya casi todos los seleccionados chilenos habían retornado a Juan Pinto Durán después del día libre. Solo faltaba uno. A esa misma hora, a la altura del kilómetro 25 de la Autopista del Maipo, en el Acceso Sur a la capital, se confirmaba que Arturo Vidal había sido parte de un accidente automovilístico retornando a Santiago desde el Casino Monticello, lo que le impidió llegar a las 23:00 al predio de Macul, exigencia de Jorge Sampaoli a sus dirigidos.

El accidente involucró a tres vehículos, incluyendo el Ferrari rojo 458 modelo Italia de Vidal, avaluado en 150 millones de pesos, y que le había sido entregado el lunes.

El automóvil habría sido impactado por alcance por un Chevrolet Sail color gris que terminó volcado y con sus ocupantes policontusos. El hombre de la Juventus salió ileso, mientras que su esposa, María Teresa Matus, registró lesiones en uno de sus brazos. El vehículo italiano, por su parte, quedó con serios daños e incluso perdió una de sus ruedas, lo que dio cuenta de la magnitud del impacto.

De todas maneras, como confirmó a hoyxhoy el cabo segundo Sagredo, de la 15ª comisaría de Buin "todos los involucrados fueron trasladados al Hospital San Luis de Buin", incluidos el Rey Arturo y su esposa con el fin de constatar lesiones y realizarle la alcoholemia pertinente.

Testigos afirmaron que vieron a Vidal ingresar caminando al recinto hospitalario junto a su esposa, lugar donde también llegaron Jorge Dessio, Felipe Correa, gerente de Selecciones Nacionales, y Fernando Felicevich, su representante. A las 22:50 Vidal abandonó al hospital escoltado por carabineros para dirigirse a la comisaría y luego emprender, finalmente, rumbo a Juan Pinto Durán.