Nicolás Labra G.

Tibio, tibio. Así se podría definir la situación de Alexis Sánchez respecto a su salida del Manchester United con rumbo a Italia para firmar por el Inter de Milán. Pese a que el jugador sacó de su cuenta de Instagram la descripción en su biografía de que es jugador de los ingleses -sí lo mantiene en la de Twitter-, todavía no hay un acuerdo concreto para su préstamo.

El problema radica en cómo se dividen las cifras de su alto sueldo durante el año en que estaría en Milán. El Inter está dispuesto a pagar una cifra cercana a las 150 mil libras a la semana, pidiendo al United que cancele al menos 250 mil libras. Para los ingleses es complicado llegar a esa cifra, recientemente le renovaron el contrato a Marcus Rashford por 240 mil libras a la semana, prácticamente la misma cifra que tendrían que pagar para que juegue en Italia.

Daily Mail entrega otro antecedente: si el Inter ejecuta la opción de compra por 15 millones no se van a mover de esas 150 mil libras a la semana, obligando al United a ver cómo finiquita el resto del contrato con el chileno.

Se suponía que Alexis debía viajar hoy rumbo a Italia, pero según Fox Sports eso no ocurrirá debido al desencuentro en las tratativas. Pero Sánchez no se queda quieto. Ayer en la mañana participó en un amistoso a puertas cerradas del equipo ante el Sheffield United, una mixtura entre jugadores del primer equipo como él, Phil Jones y Juan Mata más jugadores Sub 23.

Romelu Lukaku, quien ya está en el Inter, afirmó ayer en el podcast LightHarted que él, Alexis y Pogba fueron muy criticados. "Ellos tenían que encontrar a alguien para culpar. Yo levanté mi mano, pero no creo que fui el único que jugó mal".

el exdelantero Robin van Persie insistió ayer en que "Alexis debería encontrar la forma de ser feliz de nuevo".