Doce heridos y cinco detenidos dejó una violenta protesta en la provincia de Tucumán el lunes en la noche. La localidad argentina, que eligió gobernador el domingo pasado, es objeto de denuncias de un presunto fraude electoral con quema de urnas y hechos violentos en la jornada y los manifestantes convocaron ayer a una nueva marcha.

En los actos del lunes, la policía tucumana reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos a miles de manifestantes que protestaban ante la sede del gobierno provincial.

Sobre la denuncia, el gobierno argentino afirmó que fueron instigadas desde el exterior y podrían replicarse en otros comicios. En octubre es la primera vuelta de las elecciones presidenciales.

"Este es un sistema preparado afuera de nuestro país para deslegitimar las elecciones de los argentinos, para estorbar, para generar enfrentamiento", dijo ayer el jefe de gabinete Aníbal Fernández, en referencia a las denuncias de la oposición de que se cometieron irregularidades en los comicios en Tucumán.

Más de 40 urnas fueron quemadas durante las elecciones y la oposición denunció que sus fiscales no pudieron presenciar los recuentos de votos en varios lugares porque les fue impedido el acceso por la fuerza pública. También se denunció el robo de los documentos con los que los votantes debían sufragar.

El gobernador saliente de Tucumán, el peronista José Alperovich, repudió la represión policial y se mostró de acuerdo con que la justicia electoral abra todas las urnas para que se cuenten los votos.

"Se está investigando quién dio la orden de reprimir", dijo el gobernador, quien se mantuvo convencido del triunfo oficialista.

Corea del Sur informó ayer que ya apagó las bocinas que transmitían propaganda en contra de Pyongyang a través de la frontera, como parte de un acuerdo con su rival, Corea del Norte, para evitar una posible confrontación militar.

El Departamento de Defensa de Seúl señaló que se cortaron las transmisiones al mediodía (hora local). El organismo señaló que esperan que el Norte informe a sus soldados sobre la reducción de riesgo de un enfrentamiento bélico.

Seúl había reiniciado las transmisiones a inicio de mes, luego de una suspensión de 11 años, en respuesta a la supuesta colocación de minas terrestres por parte del Norte, que mutilaron a dos soldados surcoreanos durante un patrullaje fronterizo.

El Norte, en tanto, rechazó cualquier responsabilidad y amenazó con ir a la guerra si Seúl no se retractaba de sus acusaciones. En un acuerdo logrado tras largas negociaciones, Pyongyang "lamentó" las lesiones que sostuvieron los soldados a causa de las minas.

Más de mil colombianos iniciarán próximamente un éxodo voluntario hacia su país tras la decisión de Venezuela de mantener el cierre indefinido de los pasos fronterizos en el estado suroccidental de Táchira y la declaración del estado de excepción en la zona.

El éxodo voluntario sumado a las deportaciones que han realizado las autoridades venezolanas de 1.118 colombianos indocumentados podría agravar la compleja situación que enfrenta la ciudad fronteriza de Cúcuta, limítrofe con Venezuela, que tiene más de medio millón de habitantes y donde se declaró el estado de calamidad ante la llegada de cientos de personas, en su mayoría pobres.

El cierre de la frontera fue anunciado el viernes por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, tras un ataque armado en la zona.

El vocero del departamento de Estado de EE.UU., John Kirby, anunció ayer que su país recibirá entre 5 mil y 8 mil refugiados sirios en 2016, inmigrantes que se sumarían a los 2 mil que han ingresado durante este año. Además, informó que el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) remitió a Washington una lista con alrededor de 15 mil refugiados. Hasta fines de 2015, la ONU calcula que habrá al menos 2,27 millones de refugiados sirios en el extranjero, mientras al menos 7,6 millones estarán desplazados dentro de las fronteras de su país.

La canciller alemana Angela Merkel visitará un alojamiento temporal para refugiados en Heidenau donde hace poco hubo disturbios protagonizados por neonazis, como parte de las medidas de líderes alemanes para detener la creciente violencia que ha acompañado el aumento en el flujo de migrantes de este año. La información la entregó el portavoz, Steffen Seibert, quien agregó que la autoridad se reunirá con trabajadores.

Más de veinte presos, miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes y de las kurdas "peshmergas", lograron fugarse de una cárcel controlada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en el norte de Irak. Según informó ayer el responsable de seguridad de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), Gayaz al Suryi, durante la noche del lunes los prisioneros pudieron forzar las puertas del lugar.