Jorge Reyes Patuelli

El ministro de Salud, Enrique Paris, expresó su apoyo a los municipios que no quieren volver a las salas de clases este año en medio de la pandemia por el coronavirus. El comentario inomodó al Ministerio de Educación, desde donde informaron que era "apresurado" descartar un regreso a las aulas.

Primero fue el jefe comunal de Santiago, Felipe Alessandri, quien dijo el lunes que él no pensaba que los alumnos de la comuna volvieran a clases presenciales, dado los riesgos de generar rebrotes por esta vía.

Ayer concordó el alcalde de Colina, Mario Olavarría, quien planteó en un comunicado que la "preocupación fundamental es la salud de nuestros vecinos y volver a clases presenciales es un foco potencial para un brote de contagio por coronavirus".

El ministro Paris, después de conocer estas posturas, sostuvo en La Moneda que esto "tiene que ser evaluado por el Ministerio de Educación. No por el Minsal". Sin embargo, añadió que se trataba de "una medida conjunta. Si los alcaldes no quieren que sus estudiantes vuelvan a clases, se respetará".

Más tarde, el ministro de Educación, Raúl Figueroa, lo retrucó y sostuvo que "negarse hoy a la opción de abrir sus escuelas es apresurado y perjudica a los estudiantes, tanto en lo socioemocional como en sus posibilidades de seguir aprendiendo".

La Asociación Chilena de Municipalidades pidió al Mineduc un plan "paso a paso" para un eventual retorno. Su presidente, Fernando Paredes, sostuvo que es necesario que el Mineduc "empiece a bajar los protocolos y sobre esa base se planifique cuáles podrían ser los costos".

Según el plan del Gobierno, las clases presenciales están en la penúltima etapa antes de abrir las ciudades.

El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, dijo que lo dicho por los alcaldes "recoge un sentir muy fuerte de las comunidades educativas, que es la inseguridad de volver en condiciones en que de ninguna manera está garantizado que no haya riesgo de contagio".

municipalidades pidieron un plan "paso a paso" al Mineduc para el retorno a clases.

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Bajo una intensa lluvia la familia de Carmen Valdivia plantó ayer un árbol, un quillay, en el Parque Metropolitano Cerro Renca. La plantación fue un gesto del municipio hacia la mujer de 83 años, quien fue la primera chilena que falleció de coronavirus, el 21 de marzo, hace exactos cuatro meses.

"Más de 200 vecinos de Renca han fallecido por esta enfermedad. Muchos de estos familiares no han podido tener un rito, un símbolo, para quienes nos han dejado", dijo el alcalde Claudio Castro, ante las prohibiciones que involucran los decesos a causa del Covid-19.

Carmen Valdivia se contagió tras la visita de un familiar que trabajaba en una de las oficinas del Compin de Santiago, y que se convirtió en uno de los primeros grandes brotes de coronavirus en el inicio de la pandemia.

Aparte de ser un árbol endémico, el quillay tiene propiedades que están siendo analizadas por una empresa farmacéutica para potenciar, coincidentemente, una vacuna contra el SARS-CoV-2

Ayer, el ministerio de Salud se plegó al llamado al que convocó el proyecto "Mokita", que consistía en la realización de un minuto de silencio anoche en recuerdo de la renquina y las 8.677 personas que han muerto debido a este virus. El ministro Enrique Paris le envió sus condolencias a la familia.

El alcalde Castro dispuso también la habilitación en un sector del cerro para plantar árboles a modo de memorial por los fallecidos que ha dejado la pandemia. "La idea es dejar un símbolo vivo que honre a quienes han partido de esta tierra", explicó.

En estos días el Gobierno anunciará una nueva norma especial que buscará ir en directo beneficio de los adultos mayores que permanecen encerrados por la pandemia. Así lo aseguró ayer el ministro de Salud, Enrique Paris, quien detalló que tras el anuncio se les permitirá salir a caminar, algo que hoy no pueden hacer por las cuarentenas que rigen en 65 comunas y el confinamiento obligatorio para mayores de 75 años en todo el país.

"Hemos detectado que los adultos mayores que están sin movimiento están perdiendo masa muscular, están sufriendo afectación en su aspecto sicológico, están perdiendo calcio en los huesos", señaló el secretario de Estado.

Respecto a detalles como cuántas salidas se permitirán o qué edades podrán hacerlo no se precisó, aunque se dijo que permitirán caminatas de "unos pocos minutos". Asimismo, quienes accedan voluntariamente al beneficio tendrían que mantener medidas de autocuidado, como uso de mascarilla y distancia social. "La medida será bien recibida (...) No creo que sea contraproducente", comentó Paris.

La autoridad sanitaria añadió que también se está analizando un permiso similar que permita la salida de niños en las cuarentenas, pero precisó que esa idea no está aún confirmada, a diferencia del documento para la tercera edad, que se anunciará "a la brevedad".