Natividad Espinoza R.

Halloween es una de las festividades en que los niños tienen más contacto con personas ajenas a su núcleo familiar, puesto que la costumbre más popular es disfrazarse y salir a pedir dulces a sus vecinos, usualmente con la frase "dulce o travesura". Sin embargo, este año (particularmente mañana) las celebraciones van a ser diferentes, porque debido a la pandemia del covid-19 los expertos han llamado a evitar esta práctica callejera que ya está tan arraigada a lo largo del país.

Tomando en cuenta esto, tanto padres como hijos han tenido que buscar otras formas de celebrar Noche de Brujas y los más pequeños contaron a hoyxhoy cuáles serán sus panoramas para este Halloween excepcional.

Lucas (5) contó que "yo voy a hacer el Halloween en mi casa porque hay pandemia y me voy a disfrazar de It (Pennywise). Va a venir mi prima y la Vale, la mamá de mi prima (su tía), van a esconder los dulces que traigan y nosotros los vamos a tener que encontrar".

Esta especie de "Halloween-Pascua" de la que habló Lucas va a ser algo común, al menos en los hogares chilenos. De hecho, Pascuala (8) va a celebrar de una forma similar.

"Mi mamá compró dulces, yo ya los vi. Y mis abuelos van a traer más para esconderlos en la casa como hacen con los huevitos de chocolate. Con mi hermana vamos a tener que buscarlos, pero ella todavía no sabe así que no hay que decirle", comentó muy preocupada de no arruinar la sorpresa para su hermana Elena, de cinco años.

Otro pequeño al que sus papás quieren esconderle dulces en la casa es a Mateo (7), pero él honestamente no tiene muchas ganas porque, dijo, "eso sería muy extraño y no quiero". Luego, le dio más vueltas al asunto y dijo categóricamente: "Odio el 2020, no sirvió para ningún chorizo".

Y con sólo cinco años, Vicente tiene a sus padres complicados porque lo único que quiere es disfrazarse de palta. "No sé como hacer el cuesco, dijo Rodrigo (35), su papá.

A ganarse los dulces

A Antonio (7) le están organizando una fiesta con luces, baile y todo. Va a ir donde sus primos y los adultos van a darles premios por bailar y por tener los disfraces más originales.

"A mí no me gusta mucho bailar pero los premios (en dulces, por supuesto) van a estar buenos, parece. Yo quiero disfrazarme de Spider-Man y tengo todo listo, pero si falla tengo un disfraz de esqueleto que sería como la segunda opción", sostuvo.

"Mi mamá compró dulces, yo ya los vi. Y mis abuelos van a traer más para esconderlos en la casa.

pascuala, 8 años"

"(Esconder dulces en la casa) sería muy extraño, no quiero. Odio el 2020, no sirvió para ningún chorizo.

mateo, 7 años"

"Yo voy a hacer el Halloween en mi casa porque hay pandemia y me voy a disfrazar de It (Pennywise).

lucas, 5 años"

Un deterioro mental equivalente hasta a 10 años de envejecimiento es una de las secuelas que podrían presentar a los pacientes tras recuperarse del covid-19. Esto, de acuerdo a un estudio del Imperial College de Londres, publicado durante esta semana.

La investigación se basó en un análisis a 84.285 personas que fueron sometidas a distintas pruebas cognitivas para ver qué tan bien realizaban tareas del cerebro como recordar palabras o unir puntos en un rompecabezas. Algo aplicado comúnmente a personas con Alzheimer, por ejemplo.

De acuerdo a los responsables del estudio, encabezado por el médico Adam Hampshire, los déficits cognitivos fueron "de una magnitud de efecto sustancial", especialmente entre las personas que habían sido hospitalizadas debido a complicaciones derivadas del coronavirus. Los peores casos, añadieron, mostraron impactos "equivalentes al declive promedio de 10 años en el desempeño global en personas entre las edades de 20 a 70".

La investigación inglesa aún no ha sido revisada por otros expertos y los resultados se pueden revisar en el sitio web de MedRxiv, encargado a la distribución de estudios del área de la salud.

Científicos ajenos a la investigación llamaron a considerar que la función cognitiva anterior de los participantes se desconocía, por lo que aconsejaron tomarse estos resultados con cautela.

La seremi de Salud, Paula Labra, sugirió ayer que los niños no salgan a pedir dulces, pero de hacerlo, su consejo fue que éstos se entreguen en bolsas individuales que sean desinfectadas, de manera que se evite el contacto entre todos los niños que toquen los dulces. Asimismo, recomendó hacer recorridos pequeños, de entre tres y cinco casas y recordó que una máscara no reemplaza una mascarilla.