Una explosión de plasma magnético salió del Sol el domingo recién pasado y provocó dos erupciones, que ayer alcanzaron la atmósfera terrestre. La llamada "tormenta solar" podría alterar las redes eléctricas, de telecomunicaciones y geolocalización, según señalaron autoridades de Estados Unidos.

La Agencia Oceánica y Atmosférica (NOAA) de ese país, advirtió: "Podría provocar problemas generalizados de control de voltaje y afectar los sistemas de protección en las redes eléctricas". Satélites de navegación también podrían experimentar fallas durante varias horas, así como los sistemas de radiotransmisión a alta frecuencia.

La tormenta fue observada a las 13:58 GMT (10:58 horas de Chile) y presenta una fuerza de nivel cuatro, sobre una escala de máximo cinco, por lo que es considerada "severa", según Thomas Berger, director del Centro de Predicción Meteorológico Espacial en Boulder, Colorado. Además, agregó que el fenómeno podría durar de 24 a 36 horas, y que hasta ahora no ha sido reportado ningún problema en redes eléctricas y telecomunicaciones. Por su parte, la NASA reportó que la erupción solar no presenta niveles de radiación peligrosos para astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS). Sin embargo, hay un efecto notable de la explosión: las auroras boreales se moverán al sur y se podrían ver.

Es la tormenta solar más poderosa que golpea a la Tierra desde finales de 2013.

Apple lanzará su servicio de televisión online en Estados Unidos a partir de septiembre, informó ayer el "Wall Street Journal". El servicio, que tendrá una oferta de unos 25 canales, estará disponible tanto a través del reproductor Apple Tv como de los iPhones y iPads. El medio detalló que se suman al proyecto ABC, CBS y Fox, tres de los principales canales de ese país, con excepción de NBC, debido a un enfrentamiento con el dueño de la compañía.

La compañía japonesa Nintendo confirmó que entrará al mercado de los videojuegos para dispositivos móviles, después de años rechazando este tipo de mercado en expansión. El fabricante de "Super Mario" anunció que prevé comprar 10% de la empresa nipona DeNa por 181 millones de dólares para desarrollar conjuntamente aplicaciones de juegos basadas en sus populares personajes, sin precisar cuáles.