Ese es nuestro sueño. El que nos mueve y el que concentra nuestros esfuerzos: Que Providencia de 2020 se construya con mirada de futuro y trabajo en el presente.

Hemos dado un paso importante, destinado a iniciar el segundo tiempo de esta administración municipal. Enfatizaremos en los pilares que la ciudadanía consideró fundamentales cuando juntos construimos Providencia Somos Todos: participación, cultura, nueva ciudad, inclusión y el rescate de la identidad de los barrios.

Estamos convencidos de que el comienzo de la solución para la falta de credibilidad de la opinión pública en las instituciones y la clase política, es que todo servidor público concentre sus fuerzas en una gestión transparente que represente los intereses generales de la ciudadanía.

La pasada semana inauguramos el año escolar en el Liceo 7 de nuestra comuna. Me enorgullece destacar el Proyecto Educativo Comunal (PEC), iniciativa construida con apoderados, profesores, alumnos, técnicos y directores, proceso que se llevó a cabo durante el segundo semestre de 2014 y que entre otras iniciativas, contempla un 35% de horas no lectivas para que los docentes puedan preparar las clases y evaluar metodologías.

Se nos planteó que íbamos a tener problemas cuando abriéramos el debate al interior de las comunidades educativas. Sin embargo, convocamos más de 12 mil personas, que con entusiasmo y respeto aportaron con sus ideas. Eso es lo que entendemos como participación.

Entramos al segundo tiempo de nuestra gestión con la convicción y confianza que invitar a la gente a sumarse a discutir el futuro es la única fórmula para restablecer confianzas.

Nuestra meta es construir en conjunto, de cara a la comunidad, la Providencia que soñamos en 2020. Es una Providencia contigo, una sumatoria enorme y constante de los más diversos sueños.

Queremos funcionar como un captador de esos sueños, para que luego se traduzcan en una gestión inclusiva y transformadora de los mismos. El resultado será una Providencia más moderna, pero también más humana, justa e inclusiva.

Rubén Ojeda. Desde hace dos años es entrenador en el histórico Club México. Nació en Valparaíso y siempre disfrutó ver peleas en el Fortín Prat. Tras un corto paso por el box amateur decidió hacer el curso para monitores en Santiago. Trabajó como entrenador en la asociación de Valparaíso y a los 27 años se fue a vivir a Argentina, siempre le gustó el estilo de boxeadores mendocinos. Allá hizo cursos profesionales con Zegarra y Menacho, y a nivel internacional con el técnico de la selección de EE.UU. Vivió en San Juan durante 35 años, aunque su paradero nunca fue fijo: viajaba a dónde lo llamaran para entrenar. También por las competencias: Conoció Japón cuando fue a pelear el título mundial con uno de sus alumnos. En México sacó a Edgardo Funes campeón del mundo. "Pero viajar mucho tiene un costo y yo lo pagué con dos separaciones". En el club entrena de 15.30 a 19.30. Se enfoca en la parte técnica, para él la más fundamental: "el deporte es violento, rudo, pero no se trata de ir pa adelante a pegar, no es Rocky con la cara cortada. Vos podés darle belleza si al boxeador le enseñás la técnica". Dice que box chileno está estancado: "el problema es que pelean mucho y boxean poco, es decir, piensan poco". También la falta de recursos: "no hay quien promocione las peleas y traer a un boxeador de fuera, que sale unos US$5.000, no se paga con las entradas del espectáculo".

Pero tiene esperanzas. De las 90 peleas en las que han competido, ha ganado 82. Tiene el ojo puesto en algunos de alumnos del club y espera poder profesionalizarlos y cumplir su meta de sacar al próximo campeón chileno.

Quiero expresar mi indignación debido a la entrevista publicada el lunes a la diputada Karol Cariola. Me cuesta entender el fin de la entrevista, ya que no refleja la real importancia de su cargo, sino que se centra en su físico y en temas totalmente superficiales (" ¿Son desagradables los políticos?, ¿ha sentido atracción alguna vez por alguien de derecha?, ¿por qué se dice que los comunistas se comen las guaguas?" (...) . Me parece incluso ofensivo, ya que no consideran el impacto del medio masivo de comunicación y de la posibilidad de educar de alguna manera a la población. No porque sea gratuito deben poner irrelevancias en sus páginas. Conciencia social.

Con profunda desazón hemos conocido una vez más la escandalosa noticia respecto del cobro de peaje a los de bomberos en autopistas nacionales. El hecho no hace otra cosa que ratificarnos el descuido e incluso desprecio de la autoridad al no haber establecido en los contratos la correspondiente liberación de pago.

Quienes realizan una labor tan digna y loable además de ser un voluntariado deben habitualmente desembolsar dineros que esta actividad les representa.

Más indigno aún es el hecho de llegar a alguna localidad y encontrarse con bomberos que han debido salir a pedir colecta. (...) Es indispensable que la autoridad ponga el foco en esto.