Fue un partido distinto, tal vez, respecto de lo que los técnicos imaginaron que sus dirigidos ejecutarían dentro de la cancha.

Tanto Miguel Herrera como Jorge Sampaoli, pienso, jamás pensaron que, sobre todo en el primer tiempo, se iba a jugar de esa manera.

Pero aquí otra vez el fútbol ofrece lo que tanto nos atrae: una dosis de realidad a través de la ejecución de los jugadores.

Chile jugó mejor el segundo tiempo que el primero, pero conviene detenerse en la primera fracción para entender lo que le pasa realmente a este equipo.

Chile busca jugar dentro de un libreto que, aunque no le acomode, siente Sampaoli que es lo que más le conviene. México, en tanto, aprovechó errores puntuales en el fondo y le hizo jugar a Chile un partido mucho más difícil de lo que todos imaginamos.

Más allá de lo que la Roja hizo durante el partido, el primer tiempo de la Selección, si bien no fue malo, evidenció distracciones y errores defensivos que no pueden permitirse.

De esa manera la selección de Miguel Herrera se puso por delante de Chile sin merecerlo, porque nuestro país jugaba un mejor partido que los tricolores.

Superioridad chilena

Alguno podrá decir que en el primer tiempo México, estando en ventaja, lo hacía mejor porque desarrollaba un juego más inteligente que el de nuestro país, pero eso no fue así. Los norteamericanos ganaban el partido por accidentes del juego y no por su desarrollo mismo.

La segunda fracción evidenció lo que esta columna intenta exponer respecto de la primera parte: Chile siguió sometiendo a México pero esta vez sin errores puntuales defensivos.

Y de no mediar un par de fallos arbitrales la Roja debió quedarse con los tres puntos y con el partido. El segundo período mostró lo mejor de Chile en mucho tiempo: un equipo audaz pero maduro, un equipo ofensivo pero no irresponsable.

Seguramente un muy buen bosquejo de lo que Sampaoli quiere en esta nueva etapa de Chile. Si el resultado no terminó siendo favorable para la Selección podríamos pensar que mucho mucho no importa. Porque si la Roja vuelve a jugar así, de forma ofensiva pero responsable, de verdad tenemos opciones de pelear lo que tanto queremos.