Natividad Espinoza R.

Uno de los gastos más importantes cuando se sale de vacaciones es, sin duda, el que se hace en alojamiento. Pero a diferencia de lo que pasa con los apartados transporte y comida, sí existe la posibilidad de no pagar un solo peso en hospedaje durante todo un viaje. ¿Cómo? Aquí, algunas ideas.

Ofrecer servicios a cambio: la plataforma Lluqi (www.lluqi.com) permite a los viajeros contactarse con hostales que brindan alojamiento a cambio de servicios que el voluntario puede prestar generalmente en la recepción, en la cocina, en bares, tareas administrativas, limpieza o mantención. Aunque en algunos de los establecimientos además es posible ofrecerse para otro tipo de labores, como la de guía turístico, promotor de fiestas o profesor de idiomas.

Hasta la fecha, en Chile hay 34 alojamientos adheridos a la plataforma, de los cuales 9 están en Santiago y 25 en regiones. También se puede optar por destinos internacionales, como Medellín (Colombia), Río de Janeiro (Brasil), Quito y Baños (Ecuador), Tarija (Bolivia) y Arequipa (Perú).

Recibir y dar alojamiento: el couchsurfing es un sistema de intercambio de alojamiento que posibilita a sus usuarios comunicarse con residentes de distintas partes del mundo que están dispuestos a recibir gratuitamente en sus casas a pasajeros de otras ciudades o países. Pero además, quienes forman parte de esta comunidad deben estar dispuestos, a su vez, a recibir a otros viajeros en sus hogares. Para acceder hay que entrar a www.couchsurfing.com.

Brindar ayuda de todo tipo: Helping.Network (helping.network) es una red que permite a personas que se encuentran geográficamente cerca se ayuden entre sí en distintos aspectos, tales como alojar a otros en sus casas. Para poder publicar una solicitud de ayuda en la plataforma es necesario haber asistido a otros con antelación.