• Bolivia contratará más de 5 mil egresados de la salud para combatir el coronavirus

    Gobierno intenta reaccionar ante la aceleración de casos. Idea inicial era contratar profesionales, pero no había. Además, anunció expropiaciones de clínicas, cementerios y farmacias. Dos autoridades más se infectaron.

    Leo Riquelme

    El avance del coronavirus en las principales ciudades genera alarma en Bolivia, país donde sus máximas autoridades también están contagiadas. Es por esta razón que ayer el ministro de Defensa, en su calidad de titular interino de Salud, anunció una convocatoria para contratar a 5.666 egresados de carreras sanitarias, con el objetivo que ayuden en el combate a la pandemia.

    El programa original era contratar 7 mil titulados a costo del Banco Mundial, pero no había tal cantidad para cubrir las plazas requeridas.

    "Hoy Bolivia necesita sangre nueva, valiente", dijo el ministro de Defensa e interino de Salud, Fernando López, quien agregó que los contratados se destinarán al trabajo en zonas alejadas.

    Además, anunció la adquisición de 500 ventiladores mecánicos que llegarán por fases hasta fines de agosto; y la capacidad a la próxima semana de realizar unos 30 mil exámenes.

    "La única manera de manejar la crisis son con datos, con cronogramas, con acciones concretas", agregó.

    La ministra titular de la cartera, Eidy Roca, está en cuarentena tras dar positivo por Covid-19, una condición en la que se encuentran al menos 12 autoridades, incluida la presidenta Jeanine Áñez desde la semana pasada.

    Ayer, al grupo se sumó el viceministro de Justicia y Transparencia Institucional, Guido Melgar; y la canciller Karen Longaric.

    "He dado positivo a la prueba de la Covid-19. Por el momento, me encuentro bien y estoy asintomática. Si Dios lo permite, continuaré trabajando por Bolivia desde mi aislamiento en mi casa", tuiteó la ministra.

    Eva Copa, presidenta de la Asamblea Legislativa y segunda funcionaria en la jerarquía del Estado, dio positivo el viernes y preside las sesiones a distancia. El Congreso registra por ahora más de una decena de parlamentarios con coronavirus, lo que incluye al diputado Julio Jiménez Llanque (MAS), que falleció el 6 de julio con síntomas de esta enfermedad.

    Expropiaciones

    Según datos de la U. Johns Hopkins, Bolivia lleva casi 49 mil contagios y más de 1.800 fallecidos. Los epidemiólogos advierten que el virus inició un aceleramiento en su propagación en Santa Cruz, La Paz y Cochabamba.

    Ante este escenario ayer el gobierno anunció la expropiación de dos clínicas privadas, a los que podría sumar cementerios.

    "Seguramente les caerá como balde de agua fría esto, pero no se trata de quitarle nada a nadie. Si se expropia, será a un precio justo. No se le está quitando nada a nadie", sostuvo el ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

    Agregó que podrían hacer lo mismo con farmacias que han subido en hasta 10 veces los precios de sus productos para la pandemia, a quienes además podría llevar ante la justicia.

    "Tienen todo el derecho de ganar, pero no de robar. No le roben al pueblo, que está viviendo más de cuatro meses, muchos sin salarios" agregó.

    48.187 personas se han infectado de SARS-CoV-2 en Bolivia, donde han muerto 1.807 contagiados.

    la canciller Karen Longaric dio positivo ayer, subiendo a 12 los ministros con el virus.

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  • Congelamiento de visas golpea trabajos de verano en EE.UU.

    En la costa atlántica afirman que se quedaron sin empleados para la temporada.

    A esta altura del año, el restaurante Friendly Fisherman de Cape Cod está lleno de estudiantes extranjeros que limpian mesas y ayudan a preparar los pedidos de almejas fritas y "fish and chips" (pescado con papas fritas).

    Pero dado que el gobierno congeló sus visas, Janet Demetri no podrá contar con una veintena de empleados este verano. Y ahora que la gente está volviendo a los restaurantes, tiene solo nueve empleados y debió que cerrar dos veces esta semana.

    "Es perturbador porque hay mucha actividad", dijo Demetri. "No damos abasto".

    El gobierno de Donald Trump anunció en junio que ampliaba la veda a la entrega de tarjetas verde de residente y hacía extensiva esa medida a otras visas, incluidas las de intercambio cultural J-1 y la H-2B. Los restaurantes, hospitales y otros sectores dependen de esas visas.

    La Casa Blanca dijo que la medida abriría 525.000 plazas para estadounidenses cesantes por la pandemia, aunque no ofreció pruebas. Los partidarios de una reforma que contenga la inmigración, sobre todo ilegal, elogiaron la medida y afirmaron que debería ser fácil encontrar estadounidenses que oficien de meseros y vendan souvenirs en los sitios turísticos. Pero al parecer no lo ha sido.

    Los negocios más golpeados son balnearios y localidades de montaña a lo largo de la costa atlántica, desde New Hampshire hasta Myrtle Beach, en Carolina del Sur.

    Sus dueños dicen que les gustaría contratar estadounidenses, pero que en muchas regiones no hay suficientes trabajadores para cubrir las plazas que se crean.

  • Regulador otorga vía rápida para aprobar dos posibles vacunas

    La Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de Estados Unidos otorgó la vía rápida para aprobar dos vacunas elaboradas por la farmacéutica Pfizer y su socia BioNTech, si es que confirman las pruebas exitosas que sortearon en dos fases en ese país y en Alemania, realizadas en animales y humanos. La tercera fase parte este mes con 30 mil personas. De ser exitosa, podrían producirse a fin de año 100 millones de dosis.

  • OMS: "No habrá un retorno a normalidad en el futuro previsible"

    La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó ayer que se registraron 230 mil casos de coronavirus, la mayor cifra para un día en lo que va de pandemia. Su director, Tedros Adhanom Ghebreyesus, llamó a los gobiernos a cuidar las medidas que toman, y advirtió que "no habrá regreso a la normalidad en el futuro previsible". Agregó que para ello es necesario reducir la mortalidad y la transmisión.

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