Leo Riquelme

La Democracia Cristiana alemana (CDU/CSU) se consolidó como la primera mayoría en la elecciones generales de ese país, lo que permitirá que Angela Merkel se asegure un cuarto período como canciller. Para hacerlo, deberá conformar una nueva coalición en un Parlamento que estará marcado por la caída histórica en el apoyo de los socialdemócratas (SPD) y la entrada por primera vez desde el fin de la Segunda Guerra Mundial de un partido ultra nacionalista: Alternativa para Alemania (AfD).

"Esperábamos un mejor resultado, pero no debemos olvidar que hemos pasado por una difícil legislatura", dijo Merkel tras recibir los primeros resultados a boca de urna. Estos le arrogaban a su colectividad casi un 33%, versus el 41,5% de las elecciones generales del 2013.

El SPD obtenía un 20%, su peor resultado en la historia moderna del partido y cinco puntos por debajo de lo que recibió hace cuatro años. Los datos significarían que la colectividad no podría integrar una coalición gobernante y pasará directamente a la oposición.

"Es un día difícil y amargo", reconoció su candidato, Martin Schulz.

La sorpresa la puso el AfD, que se convertía ayer en la tercera fuerza política germana, con cerca de un 13%, versus el 4% del 2013.

"Vamos a cambiar este país (...) Vamos a echar a la señora Merkel. Vamos a recuperar nuestro país", desafió su líder, Alexander Gauland.

"¡Bravo por nuestros aliados de AfD por su resultado histórico! Es un nuevo símbolo del nuevo despertar de los pueblos europeos", los felicitó por Twitter la dirigenta utraderechista francesa Marine Le Pen.

En cambio, el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, valoró el triunfo de la CDU por su alcance para el continente. "Alemania permanece comprometida con la idea europea. Ahora, trabajemos juntos por reformar Europa", dijo.

Anoche hubo algunas protestas en Berlín afuera del bar en que el AfD celebraría su votación. Mientras, en su alocución, la propia canciller Merkel reconoció que su llegada al Bundestag "es un importante desafío".

El partido La Izquierda consiguió los votos necesarios para tener representación. Sus líderes lamentaron la "derechización" del país.

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, comentó ayer que no cree que Estados Unidos ataque a Corea del Norte, pues sabe que Pyongyang cuenta con armas nucleares. "Los norteamericanos bombardearon Irak sólo porque tenían información absolutamente concluyente de que allí no había ningún arma de destrucción masiva", afirmó a la televisión local, donde aseguró que en ese análisis "prácticamente todo el mundo está de acuerdo". A su juicio, la presión bajará "por las buenas" y con persuasión.