Ármese de paciencia si quiere ir a Concón después de Año Nuevo, u en otra post fiesta como el 18. Sorteará un taco de magnitud y luego deberá esperar su turno en algún atochado restorán, hasta que lo atiendan. El sacrificio valdrá la pena, si es que claro, tiene el dato preciso para comer y eso es comparable a ganarse algún premio en un casino. La pacífica localidad de la Quinta Región mantiene una de las principales concentraciones de restoranes con productos marinos. Hay calidad y precio en medio de un paisaje bucólico, que es la mezcla perfecta entre bosque y un océano, en ocasiones, alterado, que se extiende como cubrecama hasta el horizonte. Como antecedente, Concón en mapudungún, significa: encuentro de aguas.

El tour gastronómico es totalmente recomendable y reponedor después de cualquier fiesta y en consecuencia la sugerencia es partir temprano hacia Concón -nada de salir a mediodía-, más aún si usted viene de Santiago.

Con el transcurso de los años las empanadas de mariscos se han transformado en el escudo gastronómico de la ciudad, asunto que ya fue certificado por el célebre chef viajero, Anthony Bourdain, en su visita al país para su programa de televisión.

Es imposible atravesar la avenida Borgoño, que es la costanera, y no detenerse para saborear alguna de estas empanadas. Si de historia y anécdotas sobre las empanadas se trata, la dirección obligada es el local "Las Deliciosas", en la avenida Borgoño 25370, pues es ahí -y eso lo dicen los mismos conconinos- partió hace 47 años una tradición.

Placer de futbolistas

Rubén, el garzón de "Las Deliciosas", gesticula como si tuviera pesos en las manos y reconoce que una vez le transportó 12 empanadas al Jorge "Mago" Valdivia y familia. Todas empanadas de camarón queso. Luego los Valdivia pidieron una repetición; en total, los Valdivia se comieron alrededor de 40 mil pesos en empanadas, recuerda Rubén, mirando hacia la puerta del local. Son las 13 horas, de un día de semana, y los comensales arriban a cada rato. Rubén se frota las manos.

A los minutos Rubén surge con una bandeja de la tradicional preparación. Nos cuenta que los Valdivia se sentaron arriba -apunta al segundo

piso- y después de una hora, descendieron contentos. No fueron los únicos futbolistas famosos que arribaron al local.

Oliver Reed, administrador, nos relata que una vez apareció Marcelo "Matador" Salas. Fue la época en que jugaba en River Plate, dice sonriente. Se sentó ahí -apunta- junto a su acompañante y pidió empanadas de camarón queso, entre otras que no recuerdo -dice el hombre moviendo la cabeza. Jorge Sampaoli y Marcelo "Chino" Ríos también conocen de las empanadas de camarón queso. Son muchas las celebridades, recuerda, mirándose los dedos como si contara a los famosos.

A Reed le brillan los ojos de orgullo cuando cuenta la visita de Bourdain. Fue en marzo de 2009, cuando el entrecano chef se apareció, casi de improviso, por el lugar. "Comió empanadas de ostión, marisco, loco y macha queso, acompañadas de cerveza. Para mí fue un orgullo que haya estado acá", dice.

La Perla

La oferta de empanadas sorprende por cantidad, al caminar por avenida Borgoño hacia el sur. En una ventana del local "La Perla del Pacífico", amasa la señora Nora Contreras. Con delicadeza nos muestra las masas delgadas, tipo lámina, que al echarlas al sartén adoptarán un tono cáscara de pan. Nos cuentan, ante la observación de los garzones que se preguntan por qué la entrevistan a ella y no a ellos, que las más típicas, o sea las más vendidas, son las de macha con queso. Luego las de camarón y otros mariscos. Recalca que no hacen de pulpo. Luego llega un garzón que dice que la señora no está autorizada a dar entrevistas a la prensa.

Si hay algo extraordinario en todo el negocio de las empanadas en Concón, es que ningún de los mariscos son la de la zona. Oliver Reed reconoce que todo viene de afuera, del norte y del sur. El camarón es ecuatoriano. Como lo dice la señora Nora, la masa es lo único conconino de las empanadas más famosas de Chile.