Claudio Rojas

El OS-9 de Carabineros detuvo a nueve personas sindicadas como integrantes de dos bandas organizadas que efectuaban una serie de asaltos a centros comerciales y supermercados de Santiago y Valparaíso con el método del "turbazo".

El delito consiste en que grupos organizados compuestos por mujeres, hombres, niños y hasta ancianos ingresaban violentamente a supermercados para hurtar distintos productos, desde artículos de aseo, perfumería, abarrotes, entre otros.

Debido a la ola de denuncias por este motivo, la policía desarrolló un operativo en la zona sur de la Región Metropolitana desarticulando a las bandas "Las Cochinas" y "Los Guatones", que operaban principalmente en el sector de Puente Alto, aunque también fueron sorprendidas en Maipú y en Valparaíso.

"Las bandas están enlazadas, ya sea por relaciones sentimentales, porque son familiares y porque viven cerca", comentó el comandante Juan Pablo Ureta, de la Dirección de Investigación Criminal de Carabineros. Añadió que los líderes de ambas, al detectar el seguimiento de las policías, "intercambiaban roles, cambiaban de lugar y de liderazgo".

Según la investigación, el grupo "Las Cochinas" era liderado supuestamente por Karina Herrera, de 26 años, que cuenta con antecedentes policiales por hurto y habría mantenido al menos cinco domicilios para evitar que se le detuviera. "Los Guatones", en tanto, serían liderados por Luis Reyes, también de 26 años, el que mantiene antecedentes por robo con intimidación, hurtos y otros. Esta última banda, que es conocida por su peligrosidad, ya había sido detenida anteriormente, pero su capacidad de reorganización la hacía difícil de neutralizar, señalaron desde la institución.

Además, Carabineros precisó que la forma de actuar de los grupos ya no se configuraba como un simple hurto, pues esto respondía a una acción organizada, donde existían distintos roles de cada participante, entre los que destacan aquellos que realizaban la cobertura a través de "cordones" de seguridad.

Estos se encargaban de la protección y vigilancia de quienes sustraían las especies, utilizando la intimidación y violencia con elementos contundentes y armas blancas, para asegurar la acción, señaló la teniente de Carabineros, Javiera García, perteneciente a la Dirección de Investigación Criminal.

Los detenidos fueron formalizados por el delito de robo con intimidación y quedaron en prisión preventiva.

"los guatones" es el nombre de una de las bandas. Ya había sido desarticulada por Carabineros.

"las cochinas" se llama el grupo de al menos 15 personas liderados por una mujer. Ésta evadía a la policía viviendo en 5 casas distintas.

Diego Gotelli C.

Por su forma desde lejos parecía la chimenea de un sector industrial, pero su rápido aumento y el olor a quemado que la acompañaba develó que aquella nube de humo negra que cubrió la zona poniente de la capital en la mañana de ayer era producto de un gran incendio.

Su origen fue las bodegas de la fábrica Alfa Chilena, empresa de tecnología alimentaria ubicada en la calle Chañarcillo 668, comuna de Maipú. En el lugar estaba solamente el vigilante, quien cerca de las seis de la mañana vio desde su caseta que las llamas ya habían comenzado en la parte trasera del recinto, dando aviso a Bomberos.

"Se produce el incendio en una de sus bodegas y producto de la carga de combustible que ésta tenía en su interior se propaga a una segunda bodega", explicó el comandante Ricardo Becerra, quien descartó que hubieran lastimados producto del fuego.

Una hora más tarde comenzaron a llegar los trabajadores. Una de ellas comentó que en la zona del siniestro se realiza el procesado de alimentos con mezclas químicas, que incluye el uso de colorantes y preservantes. Precisó que ahí habrían varios artefactos eléctricos, pero que se les realiza mantenimiento constante. "Es horrible para nosotros como trabajadores. Ahora qué vamos a hacer, no sabemos nada. Qué va a pasar", agregó su compañera.

En el operativo participaron más de 15 compañías de Maipú, Santiago y Ñuñoa.

La Brigada de Homicidios de la PDI inició una investigación por el asesinato de Alexandra Vega, joven de 19 años que ayer murió baleada en la comuna de Quinta Normal.

Según el reporte policial, los hechos ocurrieron cerca de las 3 de la mañana en la esquina de José Besa con Alejandro Fierro, donde la víctima compartía con amigos y su pareja, afuera de la casa de este último. En ese contexto un auto se habría estacionado frente a ellos, del cual descendió un sujeto que disparó reiteradamente contra el grupo. Durante la balacera Vega fue herida, falleciendo luego en el SAPU de Santa Anita.

"Al cabro (su pareja) querían matarlo unos traficantes y a mi sobrina le llegó sin querer. El cabro siempre tenía problemas con hartos grupos", dijo la tía de la joven fallecida. El ajuste de cuentas es precisamente una de las teorías que maneja la policía para explicar el ataque.

La mamá de la víctima pidió a quienes sepan sobre el caso que ayuden a hacer "justicia por ella".

Cansado de que los delincuentes asaltaran su casa, un adulto mayor de El Monte que en cinco ocasiones vio como sujetos ingresaban a su propiedad, decidió instalar un cerco eléctrico artesanal en el perímetro. Fue esta medida de seguridad la que ayer evitó un sexto hurto, pero que le costó la vida al ladrón. El hecho ocurrió en la mañana, cuando un sujeto de 29 años, que según Carabineros mantenía un amplio prontuario policial por robo con intimidación y porte de arma blanca, trató de sortear el cerco, pero al tocarlo sintió la descarga eléctrica y cayó. El dueño de casa, de 74 años, al oír los gritos del intruso se despertó y junto a los vecinos llamaron a los uniformados. El electrocutado fue derivado al Hospital de Talagante, donde falleció producto de las lesiones, mientras que el anciano fue detenido y quedó citado a declarar. Según la Superintendencia de Electricidad y Combustibles el cerco no cumpliría las normas vigentes, pero eso será materia de la investigación.