C.R.H.

Nuevos antecedentes se sumaron ayer a la indagación por la muerte de Sebastián Leiva, conocido como "Cangri", y Germán Gundián, tras la formalización de uno de los bolivianos detenidos por el caso.

Raúl Sandoval, abogado de Narciso Villca Esquivel, dio a conocer parte de la declaración de su cliente a la policía boliviana y aseguró que "Cangri" pertenecía a una banda de narcotráfico.

"Los involucrados, como también Cangri, se dedicaban al narcotráfico, al tráfico de armas y se dedicaban también a la internación de vehículos robados desde Chile", dijo Sandoval.

"Es una acusación en base a la declaración de mi cliente, en la cual indica lo que ellos hablaban en el vehículo. Decían que estaban protegidos, que se dedicaban al lavado de dinero", detalló el abogado.

En tanto, Ahora Noticias, de Mega reveló parte de lo que declaró Sebastián Cornejo ante la PDI. Él fue una de las últimas personas que estuvo con el "Cangri" y Gundián antes de que ambos fueran encontrados sin vida.

En su relato, Cornejo señala que Gundián le habría contado sobre sus negocios, que consistían en pasar vehículos de forma ilegal a Bolivia, situación que Leiva conocía. De hecho, "Cangri" lo habría contactado para ayudarlo a vender un vehículo en Bolivia.

"Me saludó indicando que se encontraba en Antofagasta (...) y que Germán iba a pasar vehículos a Bolivia. Me ofreció llevar el mío. Viajé a la casa del Cangri en Antofagasta", dijo. Según Cornejo, los tres cruzaron a Bolivia con dos bolivianos que luego robaron el vehículo en el que viajaban. Al quedar abandonados, ellos se quedaron en el desierto y él caminó para pedir ayuda.

el 24 de febrero encontraron los cuerpos de "Cangri" y Germán Gundián en el desierto boliviano.

testigo clave Sebastián Cornejo fue una de las últimas personas que estuvo con Sebastián Leiva.

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Carabineros repelió a balazos un robo frustrado a un peatón durante la madrugada del jueves en las cercanías del Hotel Sheraton, en la comuna de Providencia.

El hecho ocurrió cerca de las 02.00 horas, cuando miembros de la Unidad Protección de Personas Importantes (PPI) y funcionarios territoriales de Carabineros se dieron cuenta de la situación. Los funcionarios se encontraban resguardando las afueras del hotel esperando la llegada del Presidente de Colombia, Iván Duque, quién llegó al país con motivo de la primera reunión del bloque Prosur (Foro para el Progreso y Desarrollo de América Latina).

El mayor de Carabineros, Jorge Hidalgo, informó que el hecho se inició con tres sujetos que portaban armas de fuego. Estos "proceden a intimidar a esta persona y le sustraen su teléfono celular". El oficial aclaró que los funcionarios policiales reaccionaron de inmediato "logrando la detención de una persona. No obstante, este individuo se da media vuelta y, con el arma que intimidó a la víctima, realiza cinco disparos en contra del personal policial".

Los disparos fueron respondidos por personal policial, quienes concretaron la detención.

Otro de los individuos, un menor de 16 años, fue atrapado mientras huía del lugar, pero fue trasladado con el otro asaltante a la 19ª Comisaría de Providencia. Al cierre de esta edición uno de los atacantes continuaba prófugo.

los carabineros Estaban en el lugar para resguardar la llegada del Presidente Duque al hotel.

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Dos carabineros fueron dados de baja al estar involucrados en la agresión de un imputado al interior de la 52ª Comisaría de Maipú.

El hecho ocurrió el miércoles, luego de la detención de un hombre por el delito de robo. Cuando ingresó al recinto policial escupió a un sargento segundo, quien quedó ofuscado, ingresando al calabozo del sujeto -con ayuda de un compañero- para agredir al individuo con golpes de puño y pie.

El detenido quedó con diversas lesiones y fue trasladado a un centro asistencial.

El general director de la institución, Mario Rozas, informó ayer la expulsión tanto del sargento que golpeó al imputado como del carabinero que abrió el calabozo para su ingreso.

"Fueron expulsados, eliminados, echados (...), no voy a tolerar este tipo de actitudes en los carabineros", dijo Rozas. "Me indigna y lo repudio", agregó sobre el hecho.

El jefe policial solicitó al Departamento de Derechos Humanos de la institución concurrir a la comisaría de Maipú para "erradicar la mentalidad de algunos malos elementos que nos exponen a esta vergüenza".