Mi bicicleta está de cumpleaños. Hace 23 años que la mandé a hacer así como uno se manda a hacer un pantalón. Creo que fui de las primeras mujeres que mandó a hacer en Chile una bicicleta a la medida. Mi joyita, como le digo, quedó tan buena y bien hecha que hasta el día de hoy la uso. Sólo le voy cambiando las piezas desgastadas y la he ido enchulando con accesorios nuevos. Pero no hay caso en cambiarla. Me compré otra más modernas, pero no la uso, vuelvo a mi modelo de 23 años de gran calidad.

Por eso es muy lindo ver hoy como la gente se ha ido tomando los espacios para ocupar la bicicleta como medio de transporte, haga frío o calor. Observo con mucha alegría lo que se está haciendo a nivel metropolitano. Este lunes fui a hacer una nota en directo en el Cerro San Cristóbal a las 7:30 de la mañana al Centro de Adiestramiento de perros de Carabineros, aún estaba oscuro cuando subíamos en el móvil del canal y para mi sorpresa, ya estaba lleno de ciclistas y runners (o corredores, como le guste más), subiendo y bajando el cerro. Y aunque hacía un frío espantoso, hoy hay todo tipo de ropas especiales para no tener excusas con el clima. Estaban todos muy bien aperados con gorros, bufandas, guantes, anteojos especiales y con todo tipo de embelecos para sortear el frío. Realmente quiero destacar que noto que hay un cambio cultural importante con el uso de la bicicleta, no sólo para trasladarse al trabajo, sino que también como una manera de mantenerse físicamente. Y se nota, los domingos cuando la CicloRecroVía que ya cumplió 10 años y que se abre por la Costanera en Providencia hasta el centro los domingos, se llena de tienditas que ofrecen desde los accesorios más simples hasta los más sofisticados para los fanáticos de las dos ruedas como yo. La demanda ha sido tan grande que las autoridades se han hecho eco de esta necesidad de tener pistas especiales para andar en bicicleta por Santiago.

Hace unos días se inauguró en Providencia un tramo de dos kilómetros en el Parque Uruguay de la nueva ciclovía y como parte del plan mayor "Mapocho42k", que es unir 8 comunas de Santiago en 42 kilómetros desde Pudahuel hasta Lo Barnechea por ambos lados del Río Mapocho y que no sólo considera pistas para andar en bicicleta con tranquilidad sino también para peatones y zonas de parques y recreación. La verdad, eso nos cambiará la calidad de vida en varias comunas de Santiago. Un cambio para nuestra ciudad que necesita tanto de pulmones verdes para contrarrestar el smog que casi nos mata en esta época del año.

Destaco esta iniciativa porque realmente da gusto el standard de estas pistas que son usadas por miles de personas para trasladarse por Santiago. Vi pistas anchas, asfaltadas y con señaléticas claras para los cruces. Da gusto también el tramo que está abierto por el borderío en Vitacura a la altura del Parque Bicentenario. Invito a todos a que las usemos y compartamos este espacio público que es de todos los santiaguinos.

"Realmente noto que hay un cambio cultural importante en el uso de la bicicleta, no sólo para trasladarse al trabajo sino que también como una manera de ejercitarse

Un consejo

Para saber cómo va el proyecto completo y en qué etapas están en cada una de las comunas implicadas, visitar el sitio web www.mapocho42k.cl. Ahí se explica también cuáles son los fundamentos del proyecto respecto a tener ciclovías de paseos y parques integrados que tiene como eje nuestro Río Mapocho, que ha sido tan vilipendiado o por tener mucha agua o por no tener casi nada.