Leo Riquelme

La venta estaba lenta en esa zona de Cerrillos. Eran cerca de las 10.00 y Luis Ribera Sandoval, de 66 años, y Mario Zamorano Yáñez, de 60, dejaron por unos instantes de centrarse sólo en ofrecer sus banderas chilenas a los automovilistas que circulaban por la avenida Pedro Aguirre Cerda y se pusieron a conversar.

Los vendedores ambulantes miraban hacia el norte. No se dieron cuenta que a sus espaldas venía un camión que se alistaba a virar para seguir por la avenida Lo Errázuriz. En su tolva transportaba unos tubos de fierro de 12 metros de largo, 58 mm de espesor y 900 kilos cada uno. Dos de ellos se desplomaron sobre los comerciantes, que murieron en el acto.

Las estructuras eran tan pesadas que ni los testigos que corrieron a socorrerlos pudieron moverlas.

"Fue horrible. Los tubos los mataron instantáneamente", comentó a los medios una de las personas que vio el accidente.

Sobre la causa del hecho, las versiones difieren. El chofer negó que los tubos cayeran a causa de un mal estibamiento. Aseguró que se produjo porque se cortaron las dos lingas que los unían a la máquina. Una persona que afirmó que iba detrás en su vehículo particular dijo que el camión debió sortear a un automóvil que se coló cuando iba a virar.

La versión que entregaron testigos como el dueño de un lubricentro del sector (Cristián Castro) y Carabineros (el mayor Emilio Teixidor) lo desmienten. Dijeron que sólo llevaba una linga; que los tubos sobresalían de la tolva; y negaron incluso la participación de otro vehículo. Al menos, las cámaras del sitio no lo habrían registrado.

Los familiares de las víctimas llegaron desconsolados al lugar. "Mi suegro se sacaba la cresta trabajando", dijo uno de ellos. "Era alegre, no fumaba, no tomaba, era sano (...) Él trabajaba porque las jubilaciones son pésimas (...) Tantas personas mueren en el anonimato", agregó otro.

el camión fue decomisado. Era apto para transportar ripio y carecía de un sistema anti deslizamiento.

hoy será formalizado el conductor del camión. Sería imputado por cuasidelito de homicidio.

Por Paulina Flores

Margarita. Vive en Maipú con su esposo, ambos son pensionados: "Nos compramos un taxi para tener otra entrada, porque para qué estamos con cosas, las jubilaciones son pésima. Pero también lo hicimos para entretenerse, para tener una rutina, porque él trabaja relajado, en el día".

"Antes de jubilarme yo era contadora, el último tiempo trabajé con firmas pequeñas, empresas de ropa de trabajo, cosas así. Cuando me retiré decidí abocarme a mis nietos, porque en la casa tenía mucho tiempo para pensar y necesitaba salir. Así que ahora todos los días visito a un nieto, tengo tres. Los lunes y los miércoles me junto con los más chicos y los martes y los jueves veo a la más grande. Para mí ellos han significado una nueva oportunidad, en el sentido de darles el tiempo que no les di a mis hijos: regalonearlos más y un poquito malenseñarlos, pero un poquito. Los más chicos son varones y tienen 3 y 6 años, yo bajo hasta casi el nivel de ellos: jugamos a las guerra, andamos en bicicleta… ahora estamos en la lucha de los dinosaurios, o les invento cualquier cosa, que vamos a hacer una carrera o una expedición, para que dejen el celular de lado y salgan conmigo a la plaza. La más grande tiene 13 y con ella vamos al cine, al mall o almorzamos algo rico".

En el futuro quiero recorrer lugares de mi propio país, que no conozco, el que mis hijos sí han visitado y del que me cuentan y me muestran fotos. Yo no lo hago porque mi esposo es más de casa que yo. Tengo que zamarrearlo, por decirlo así, para que se decida a hacer algo. San Pedro de Atacama es al primer lugar que quiero ir".

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La Brigada de Homicidios de la PDI tiene identificados a los tres sospechosos que habrían quemado vivo a un hombre de 29 años en la comuna de la Renca, en venganza por el robo de una mochila con dos kilos de droga.

Uno de los acusados fue detenido ayer en la misma comuna. Camilo Barrera, de 19 años, no registraba antecedentes penales anteriores.

Tras ser detenido confirmó que fue a comprar bencina junto a su padre y un amigo de él, pero que fue sólo un acompañante. Luego se habrían dirigido al Parque Las Palmeras, en donde atacaron a la víctima, instancia en la que Barrera aseguró no haberse bajado del auto.

La Fiscalía Centro Norte le imputó al sujeto el delito de homicidio calificado y frustrado. Quedó en prisión preventiva durante los próximos 120 días, que es el plazo para la investigación.

La policía se encuentra en búsqueda de los otros involucrados. En tanto, la víctima que resultó con el 90% de su cuerpo quemado sigue en estado crítico en el Hospital San Juan de Dios.

en estado crítico se mantiene la víctima tras resultar con el 90% de su cuerpo quemado.