Leo Riquelme

Unas 50 capas de pintura removieron los encargados de la empresa Alto Presión que restauran los emblemáticos juegos de la Plaza Brasil de Santiago, diseñados por la artista plástica Federica Matta e inaugurados en 1993.

La obra nunca tuvo el color que ideó en las maquetas la hija de Roberto Matta. El conjunto escultórico se compone de la Cordillera (un banco-juego de 25 metros), el Templo Tobogán (juego y banco), el Cerro Santa Lucía (escultura-juego 5x15 m), el Volcán Tobogán, un Iceberg y columpios, todos pensados para acercar el arte a la gente de manera lúdica e integrada.

El gerente general de Alto Presión, Daniel Silva, explica que la falta de tecnología obligó en los '90 a utilizar acrílico de automóviles para colorearlos. "Los juegos eran pintados unas dos veces al año, entonces el original se diluyó hace tiempo", lamenta.

Para dar con el color de las maquetas un equipo de profesionales de la compañía trabajó directamente con expertos de Sherwin Williams. Así hallaron los pantones exactos, que ahora serán de poliuretano.

El trabajo ha sido monitoreado en todo momento por Federica Matta, primero en Chile y luego a través de su supervisora para sus obras en el país, la gestora Su Conejeros. "Quedó en súper buenas condiciones, en la calidad del diseño original de la artista", valoró ésta última.

La restauración incluyó la reparación de las esculturas, que mostraban el paso de 25 años de uso intensivo. "Estos juegos estaban en muy malas condiciones, no se había realizado una recuperación de ellos hace muchos años", dijeron desde la municipalidad.

El proyecto demandó $60 millones aportados por la Subsecretaría de Desarrollo Regional. Las obras están en su fase de mejoramiento de jardines, nivelación de suelo e instalación de goma eva en el suelo, para hacerlo más blando y reducir el impacto de las posibles caídas de los niños. En el municipio apuestan a inaugurarlo en septiembre.

"Esperamos que la gente lo valore, porque es una puesta en valor de arte único", planteó Daniel Silva.

"Este es un proyecto que aporta a la experiencia (...) El asunto es que perdure, porque si no hay una mantención adecuada esto no va a funcionar", agregó Su Conejeros, quien pidió la ayuda de la comunidad para esta labor.

federica matta La artista de 63 años creó este proyecto en 1988 en unas maquetas, las mismas que se usaron para la restauración