Carolina Collins

Además de un concierto, lo que ocurrirá esta noche en la clásica discoteque capitalina, Blondie, será una especie de acto político. Las rusas Pussy Riot debutarán en el país con un show cargado de feminismo y consignas políticas.

Las rusas, que se hicieron famosas a nivel mundial luego de que tres de sus integrantes fueras detenidas en 2012 por improvisar un provocador concierto en la Catedral de Cristo Salvador de Moscú, ya estuvieron en Argentina el fin de semana, donde mostraron un show en el que, a cara cubierta por pasamontañas de colores, gritaron consignas contra Vladimir Putin y Donald Trump.

"Esta es la canción que nos metió dos años en la cárcel", anunció, según Clarín, una de las integrantes del colectivo en el show que antecedió al de hoy, que tuvo como apoyo las imágenes de la detención que conllevó un juicio que fue registrado en el documental estrenado en 2013, "Pussy Riot: una plegaria punk".

El famoso episodio no fue la última irrupción pública de las rusas, que en 2018 aprovecharon el Mundial de Fútbol que se realizó en su país para ingresar a la cancha disfrazadas de policías durante la final entre Francia y Croacia. Una de ellas incluso chocó las palmas con el seleccionado galo Mbappé.

El show de hoy en Chile de la banda liderada por la vocalista Nadya Tolokonnika, será antecedido por una rutina de las comediantes nacionales Jani Dueñas y Paloma Salas, quienes replicarán en vivo la sección "Es Verdad" que hacían en el programa radial que tenían juntas en la radio online Big.

También teloneará a Pussy Riot la banda punk chilena Horregias, que a través de sus canciones critican el machismo desde una perspectiva LGBT.

Las entradas para ver el debut de Pussy Riot en Chile cuestan $ 22.000.